Se estima que entre 2015 y 2050 la proporción de la población mundial con más de 60 años pasará de 900 millones a 2.000 millones, lo que representa un aumento del 12 al 22%. Cada vez tenemos una población más envejecida, pero aún existen preguntas que resolver en torno al envejecimiento, un proceso natural de la vida que todos queremos transitar de la mejor forma posible.
El Centro Internacional de Investigación en Envejecimiento (ICAR, por sus siglas en inglés), ubicado en Elche, apuesta por convertirse en un centro de referencia a nivel nacional y europeo sobre envejecimiento. El ICAR, que cuenta con una financiación inicial de 2,5 millones de euros por parte de la Generalitat de la Comunidad Valenciana, ya ha dado sus primeros pasos, con la constitución del patronato fundacional. Un órgano que ha contado con el apoyo del empresariado de la provincia de Alicante.
La iniciativa es fruto de la colaboración público-privada. Así lo explica la secretaria autonómica de Universidades e Investigación en la Generalitat Valenciana, Carmen Bevia: “Lo hemos creado como una fundación privada, con capital público-privado porque una fundación privada siempre tiene una cierta flexibilidad a la hora de contratar y de moverse, ni tiene las rigideces de un sistema público”.
ICAR centra su investigación en biología y en tecnologías disruptivas aplicadas al envejecimiento
Tras la firma de patronato fundacional, se establecerán las directrices y las actuaciones a emprender para proceder a la contratación de la persona que ocupará la gerencia y del personal administrativo. Aparte, durante el primer semestre del año se va a realizar una llamada internacional para atraer a investigadores de prestigio a la Comunidad. De manera que puedan empezar a desarrollar su trabajo, ya bajo el paraguas de ICAR, en las instalaciones de la Universidad de Alicante y la Universidad Miguel Hernández de Elche.
La investigación va a tener dos grandes pilares: investigación en biología y en tecnologías disruptivas aplicadas al envejecimiento, siempre desde una perspectiva multidisciplinar. “Dentro de la parte de biología estamos hablando de estudios sobre telómeros, sobre células madre, de metabolismo, de alzhéimer y párkinson, enfermedades crónicas y relacionadas con la demencia…”, detalla Carmen Bevia.
Por otro lado, las tecnologías disruptivas aplicadas al envejecimiento son todas aquellas que asistan a los mayores en sus casas. Además de tecnologías móviles y "weareables" para el envejecimiento saludable o la Inteligencia Artificial centrada en las personas, entre otros ejemplos.
ATRAER TALENTO HUMANO
La consejera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital de la Comunidad Valenciana, Carolina Pascual, ha defendido que “ICAR forma parte de una estrategia global que tiene por objetivo principal atraer, retener y consolidar talento humano para la formación de equipos de investigación de excelencia y con un impacto significativo en la sociedad y economía valenciana, y por extensión en la española.
Así, investigar sobre envejecimiento no solo beneficia a los mayores, sino a todos: “Esta población envejecida mejor que esté bien cuidada, saludable, que siga dándole servicio a la sociedad porque lo vamos a necesitar. Una población fuerte, con energía y capaz de seguir trabajando y sana es eficiente para todos”, destaca la secretaria autonómica de Universidades e Investigación en la Generalitat Valenciana.