El Programa de Optimización de Antibióticos (PROA) del Hospital Clínico Universitario de Valencia consiguió en el año 2018 una disminución global del 25% en el número de dosis de antibióticos por estancia hospitalaria. Esta disminución ha sido posible en aquellos servicios donde se dispone de prescripción electrónica.
Este programa se puso en marcha en 2016 y contempla una serie de iniciativas para mejorar el uso de antimicrobianos y reducir de este modo el riesgo de resistencias bacterianas. El grupo está formado por la farmacéutica especialista en farmacia hospitalaria Carmen Carrión; el especialista en microbiología, Javier Colomina y Rosa Oltra, la especialista en Medicina Interna de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínico.
El principal objetivo es reducir el riesgo de resistencias bacterianas
Entre los objetivos del grupo PROA se encuentran el control de uso de antibióticos de amplio espectro (que son aquellos que presentan mayor capacidad de producir resistencias), el fomento del paso temprano del antibiótico a vía oral o el seguimiento de la prescripción de antibióticos de elevado impacto ecológico, es decir, con elevada capacidad de producir resistencias bacterianas.
Tal y como han explicado los y las profesionales que forman parte del grupo en 2017 se inició la implantación de una serie de medidas dirigidas a delimitar la duración de los tratamientos antibióticos en el programa de prescripción electrónica. De esta forma, el profesional sanitario debe reevaluar la necesidad de continuar con el tratamiento antibiótico pasado este período. Se reduce así el número de días innecesarios de tratamiento.
El análisis de los datos de utilización de antibióticos del año 2018 ha mostrado una disminución global del 25% en el número de dosis diarias ponderadas por estancia respecto a 2017 en los servicios en los que se dispone de programa de prescripción electrónica, el importe de antibióticos ponderado por estancia.
REDUCIR LA RESISTENCIAS BACTERIANAS
La finalidad principal de este grupo de trabajo es reducir la selección y diseminación de resistencias a los antibióticos a través de la mejora de su uso.
Para ello, los tres profesionales que forman el grupo PROA, se reúnen regularmente para diseñar estrategias, difundirlas entre el personal sanitario, hacer un seguimiento y evaluar los resultados de las mismas.
Se ha creado además el Equipo Multidisciplinar de Bacteriemias con el objetivo de mejorar los resultados clínicos, aumentar la supervivencia y incluso disminuir las resistencias. Este grupo está formado por especialistas en microbiología e internistas de la Unidad de Enfermedades Infecciosas.