Entre las consecuencias de la catástrofe meteorológica se encuentran los problemas de salud mental, consecuentemente, un total de 120 profesionales en salud mental están prestando asistencia psicológica a las personas afectadas por las inundaciones, desde los servicios implantados específicamente por la Conselleria de Sanidad.
En la primera semana tras la riada, la Conselleria de Sanidad, a través de la Oficina Autonómica de Salud Mental, empezó a activar progresivamente y en función de la accesibilidad que se iba teniendo, los 17 puntos extraordinarios instalados en diferentes municipios de las zonas afectadas de l’Horta Sud y de La Ribera. En estos puntos se ha ofrecido una atención integral, especializada y continua, al mantener la asistencia los fines de semana en un punto concreto de los municipios de Albal, Alfafar, Benetússer, Chiva, Massanassa, Paiporta, Picanya, Sedaví y Torrent, y en el caso de Aldaia y Catarroja contaban con dos puntos en cada municipio.
Se activaron puntos extraordinarios en Guadassuar, L’Alcúdia, Algemesí y Sueca para evitar el desplazamiento de los pacientes
A pesar de que el departamento de salud de La Ribera mantuvo abiertas todas sus unidades de salud mental, se activaron puntos extraordinarios en Guadassuar, L’Alcúdia, Algemesí y Sueca para evitar el desplazamiento de los pacientes. Por su parte, las unidades de salud mental del departamento de Requena estuvieron prestando asistencia desde el inicio a las poblaciones afectadas de esa zona.
Además, se puso en marcha la Unidad de Atención Psicológica, en el Centro de Eventos de Feria Valencia, desde la que 30 profesionales dieron asistencia, tanto presencial como remota, mediante llamadas telefónicas y videoconferencias.
Por otro lado, durante toda la primera fase de la emergencia, las Oficinas de Asistencia a las Víctimas del Delito movilizaron a psicólogos, trabajadores sociales y letrados para la atención y acompañamiento a familiares de fallecidos y desparecidos, que prestaron asistencia a más de 180 familias, tanto en el momento de presentar la denuncia y la recogida de datos, hasta la posterior derivación a servicios específicos según el caso, como los servicios puestos a disposición por Salud Mental.
Se ha recuperado la actividad en la mayoría de las consultas de las unidades de salud mental de las zonas afectadas
Actualmente, se ha recuperado la actividad en la mayoría de las consultas de las unidades de salud mental de las zonas afectadas, y se mantiene un punto extraordinario de atención en Paiporta y, en el caso de la unidad de salud mental de Catarroja, la consulta se está prestando en un centro habilitado ‘ex profeso’ en Albal.
Estas unidades fueron diseñadas nada más producirse la emergencia como parte de un plan estratégico para garantizar la continuidad asistencial más allá de los primeros días, puesto que la afectación en salud derivada de esta situación puede extenderse a meses y a años posteriores, por lo que se espera que estas unidades permanezcan activas durante los próximos años.
Adicionalmente, la Conselleria de Sanidad ha destinado 20 psicólogos de reciente incorporación a los centros educativos más afectados. Realizarán cribajes regulares a través de cuestionarios específicos de estrés, o las unidades de prevención de las adicciones, así como formación especializada y continua a los profesionales.
Todo esto se ha sido posible gracias a que el Consell ha realizado el mayor incremento en personal para la atención a la salud mental en la Comunitat Valenciana con la creación el pasado mes de octubre de 200 nuevas plazas previstas en el Plan de Salud Mental 2024-2027, lo que ha permitido evitar el colapso del sistema y garantizar una atención de calidad a las personas afectadas.