La Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana ha expresado su "rechazo" y "más rotunda condena" a la agresión, en el ejercicio de sus funciones, a una facultativa del departamento de salud de Orihuela, según han señalado fuentes del departamento que dirige Marciano Gómez.
La agresión tuvo lugar el pasado 28 de agosto en el hospital comarcal de la Vega Baja, en Orihuela, cuando el padre de un paciente asestó un puñetazo a la anestesista que había tratado a su hijo.
A través del servicio de Prevención de Riesgos Laborales y del servicio Jurídico del departamento de salud de Orihuela, Sanidad ha ofrecido asesoramiento y asistencia jurídica a la facultativa, que ya ha recibido el alta.
El Departamento de Salud Orihuela ha convocado una concentración para este viernes, a las 12 horas, en la puerta principal del centro sanitario
Asimismo, Sanidad solicitará a la Abogacía de la Generalitat la personación de la Generalitat como acusación particular en el procedimiento, tal y como prevé el Plan Integral de Prevención de las Agresiones en el Entorno Sanitario de la Conselleria de Sanidad.
La Conselleria puso en marcha el pasado mes de marzo una campaña de concienciación contra las agresiones al personal sanitario con el lema 'Es delito', ya que proteger a los profesionales y evitar este tipo de agresiones es una "prioridad" para la administración sanitaria valenciana, que recuerda que las agresiones al personal sanitario son delito y tienen consecuencias en forma de penas, sanciones y multas.
El personal sanitario está reconocido como autoridad pública en la Ley 10/2014, de 29 de diciembre, de Salud de la Comunitat Valenciana, por lo que una agresión a un sanitario tiene consecuencias penales, tal y como está recogido en el Código Penal.
Tras la reforma del Código Penal del año 2015, agredir o intimidar de forma grave a un profesional sanitario se considera delito de atentado. Los agresores podrían cumplir penas de prisión de entre seis meses y tres años, incluso cuando el ataque se produjese fuera de su lugar de trabajo, pero motivado por su condición de sanitario.