La consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Ana Barceló, presentó un plan para comprar vehículos destinados a los Puntos de Atención Continuada (PAC). Sin embargo, según informa el diario Las Provincias, la Central Sindical Independiente y de Funciones (CSIF) ha presentado una denuncia por este, ante la Inspección Provincial de Trabajo.
En concreto, la queja se debe a que estos nuevos vehículos no cuentan con conductor y son los propios médicos quienes tienen que hacerse cargo de conducir los coches en las urgencias y atenciones domiciliarias.
CSIF considera “incompatible” que los médicos que hacen guardias también tengan que conducir para acudir a una urgencia
Tal y como explican en Las Provincias, fuentes del CSIF explicaron que la denuncia se basa en la incompatibilidad de que médicos o enfermeros que realizan guardias de entre 18 y 24 horas “hagan también tareas de conducción para, además, acudir a una urgencia”.
Del mismo modo, desde el sindicato recordaron que los profesionales sanitarios “no han sido formados como conductores profesionales” y apuntaron a las propias recomendaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT) de no mantener jornadas prolongadas sin dormir con el fin de evitar accidentes”.