Ana Barceló, consellera de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana, ha anunciado que el nuevo “Protocolo de Atenció Integral, Sanitaria y Judicial a Víctimas de Agresiones Sexuales”, se aplicará en todos los servicios de urgencia de los hospitales de forma coordinada con el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) y los servicios de Atención Primaria de la Comunidad Valenciana.
Los datos del Ministerio del Interior muestran un progresivo y preocupante aumento de las agresiones sexuales con penetración. En el primer trimestre de 2018 se llegaron a denunciar hasta cuatro violaciones diarias. Una cada seis horas.
Una de cada 20 mujeres de la Unión Europea ha sido violada
La última macroencuesta realizada por el organismo revela que una de cada 20 mujeres de la Unión Europea ha sido violada, y que el 98% de los agresores son hombres. Si ponemos el foco en España, vemos que el 94% de las mujeres que han sido víctimas de agresiones sexuales por parte de su pareja las han sufrido en más de una ocasión.
En el caso de la Comunidad Valenciana, la región ocupaba en 2017 el cuarto lugar de España por número de delitos contra la libertad sexual, por debajo de Cataluña, Andalucía y la Comunidad de Madrid.
Todos estos datos han sido tenidos en cuenta a la hora de elaborar el citado protocolo que se ha erigido como el eje central de la joranda “Adolescencia y Violencia de Género” que se ha celebrado en el Hospital Doctor Peset.
Las víctimas de estos delitos sexuales tienen que hacer frente a dos problemas. El primero es la agresión en sí misma. Después, el miedo se convierte en protagonista y surge además el temor a no ser creídas, juzgadas e incluso que se las llegue a responsabilizar de la agresión.
"Lo que se pretende es evitar un perjuicio adicional a los daños derivados de la agresión, facilitar la persecución del delito y evitar la llamada victimización secundaria"
Motivos por los que el protocolo establece una acción coordinada con los juzgados de guardia, medicina forense, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Oficinas de Atención a las Víctimas del Delito y Centros Mujer 24 horas.
"Al actuar con rapidez, eficacia y coordinación lo que se pretende es evitar un perjuicio adicional a los daños derivados de la agresión, facilitar la persecución del delito y evitar la llamada victimización secundaria", explica Barceló para que la víctima evite tener que repetir el relato de lo sucedido o que sea explorada más veces de las realmente necesarias.
Unas acciones conjuntas que deben estar enmarcadas en la más absoluta confidencialidad para respetar la intimidad de la víctima y se puedan recabar el mayor número de pruebas en un entorno tranquilo.
De esta forma se establecerá un circuito de acompañamiento a la víctima en cada centro sanitario que se pondrá en marcha en el mismo momento en el que se active el protocolo. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, cuando sean requeridas, se personarán en los centros y acompañarán a la víctima a poner la denuncia.
El personal médico elaborará el parte médico y el informe médico de presunta agresión se enviará al juzgado con la mayor brevedad posible. Este protocolo establece que, una vez se produzca la admisión en Urgencias, el caso quedará codificado bajo la denominación “atención de carácter judicial”. Además al paciente se le atenderá de forma segura y en los primeros 30 minutos. Las mujeres serán derivadas a Ginecología y los hombres al servicio de Urgencias o a Urología.
En todo momento se garantizará la cadena de custodia de las muestras obtenidas en la exploración, se realizará un test de embarazo y se efectuará un tratamiento profiláctico con el objetivo de prevenir posibles infecciones provocadas por enfermedades de transmisión sexual. Y, aunque la víctima no quiera denunciar, se comunicará el hecho al juzgado de guardia.