La Comunidad de Madrid ha celebrado la jornada “20 años después de los atentados terroristas del 11 de marzo, ¿qué hemos aprendido sobre su impacto y atención psicológica?”, encuentro que ha reunido a un centenar de psicólogos. De este modo, se han podido analizar las consecuencias psicopatológicas y la intervención de emergencia en un caso de tanto impacto emocional.
En este contexto, la viceconsejera de Justicia y Víctimas de la Comunidad de Madrid, Carmen Martín García-Matos, ha agradecido la labor que realiza este colegio profesional y ha destacado “el compromiso absoluto e incondicional del Gobierno regional con las víctimas que han sufrido un atentado terrorista”.
“Está fuera de toda duda la firmeza de este Ejecutivo en el apoyo a todas ellas, con todos los damnificados, sus familiares y las asociaciones y fundaciones que representan sus intereses”, ha subrayado García-Matos en el acto celebrado en la sede del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid.
García-Matos: “Está fuera de toda duda la firmeza de este Ejecutivo en el apoyo a todas las víctimas, con todos los damnificados, sus familiares y las asociaciones y fundaciones que representan sus intereses”
Madrid aprobó, en 1996, una Ley de Víctimas, convirtiéndose en una de las primeras comunidades autónomas en hacerlo. Posteriormente, la norma fue modificada en 2019, para extender su ámbito de aplicación, con la incorporación de nuevas ayudas y medidas, así como el reconocimiento público de la labor de las asociaciones, fundaciones, entidades e instituciones de representación y defensa de sus intereses.
Este año, la Comunidad de Madrid destinará 15 millones de euros en indemnizaciones por fallecimiento y daños físicos y psíquicos a víctimas del terrorismo, cantidad que multiplica por tres los 5 millones de euros del ejercicio anterior. Además, el Ejecutivo autonómico dedica anualmente 300.000 euros para subvencionar a entidades sin ánimo de lucro, incluidas en el registro regional o estatal, cuyo objeto es la representación y defensa de los intereses de los afectados, así como a sus familias o personas con quienes conviven.
Los atentados del 11 de marzo de 2004 fueron una serie de ataques terroristas producidos en Madrid en cuatro trenes de la red de Cercanías. Ese día, 192 personas fallecieron y en torno a mil quedaron heridas. Se trata del mayor atentado de la historia de España y el segundo mayor atentado cometido en Europa, solo superado por el atentado de Lockerbie de 1988.