Las huelgas sanitarias en España se han convertido en una constante en las últimas semanas. Este mismo miércoles, sin ir más lejos, comenzaron los paros en Cataluña convocados por el sindicato Metges y que llaman a 25.000 facultativos del sistema público de salud catalán a secundar sus reivindicaciones. Sin embargo, el diálogo y la predisposición al acuerdo parece también una constante en muchas otras comunidades autónomas que recientemente han llegado a acuerdos para paralizar las huelgas de facultativos médicos. Es el caso reciente de regiones como Andalucía, Extremadura, Aragón o Cantabria. En estos casos los sindicatos huelguistas han conseguido acordar mejoras con las respectivas Consejerías, alejando así la posibilidad de paros que sólo terminan afectando a los ciudadanos en su derecho a acceder al servicio de salud pública.
Un caso paradigmático es el la Comunidad de Madrid, donde el sindicato Amyts viene alargando las protestas desde el pasado mes de noviembre, a pesar de las siete reuniones mantenidas con la Consejería desde entonces y las propuestas de mejora que tiene sobre la mesa por parte del Gobierno regional. Medidas trasladadas por el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, quien considera que “dan respuesta” a todas las demandas iniciales que sustentaron la convocatoria de huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria. Ante esta circunstancia de bloqueo que sostiene el sindicato, desde la presidencia madrileña, Isabel Díaz Ayuso afirmaba este miércoles su convencimiento de que "la huelga de la Sanidad es una huelga política” que “ya no sigue nadie” (un 2,26% de seguimiento este jueves en el turno de mañana, lo que supone que de 1.855 médicos han hecho huelga 42, y un 1,73% en el turno de tarde, lo que quiere decir que de 2.204 médicos han secundado el paro tan solo 38) y “han pretendido prolongar hasta elecciones cada día con una excusa diferente". Además, añade, que ante la llegada de los comicios, “Madrid es la pieza a batir”.
En ninguna de estas comunidades se ha planteado “una subida salarial como la que se inventó por el camino durante las negociaciones el sindicato convocante de la huelga política en Madrid”
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, fundamenta su convicción de que existen intereses políticos ocultos en estos paros en el hecho de que, en otras CC.AA, propuestas similares o de menor calado que las ofrecidas por la Consejería de Sanidad madrileña han llevado a rápidos acuerdos entre los responsables políticos y las asociaciones sindicales regionales. “En Aragón han acordado un Plan de Atención Primaria de 8 millones de euros al año, mientras que la Comunidad de Madrid ya puso sobre la mesa 200 millones de euros en tres años para la Atención Primaria”. No en vano, el Gobierno aragonés, presidido por Javier Lambán, logró paralizar el pasado 18 de enero la amenaza de huelga de los sindicatos Fasamet y CESMAragón, sin que los paros llegaran ni a comenzar.
Refiriéndose a los acuerdos alcanzados en regiones como la propia Aragón, Extremadura, Cantabria o Andalucía, Ayuso quiso remarcar que en ninguna de estas comunidades se ha planteado “una subida salarial como la que se inventó por el camino durante las negociaciones el sindicato convocante de la huelga política en Madrid”. Hace referencia a la demanda por parte de Amyts de una “subida lineal para todos los médicos de familia y pediatras de 479€” que la Consejería ha venido denunciando en las ultimas semanas. Una reivindicación que se aleja significativamente de las que cualquier sindicato médico de otras CC.AA. ha trasladado a ninguno de sus Gobiernos. Las demandas más esenciales compartidas por los comités de huelga sanitarios han ido en la línea de una mejora en la sobrecarga asistencial; basadas en reducir el número de pacientes que cada médico tiene que atender en su jornada e incrementar el valor de las horas de guardia o la atención de pacientes fuera del cupo límite diario.
“Todas las comunidades han pedido más tiempo para el paciente y la reducción de agendas de trabajo. Esto es algo que nosotros propusimos desde la primera reunión, antes incluso de que hubiera huelga”
Un buen ejemplo donde se pueden observar las singularidades en la Comunidad de Madrid a la hora de alcanzar un acuerdo con el sindicato convocante de la huelga (Amyts) la encontramos en las limitaciones de agenda de los facultativos. “Todas las comunidades han pedido más tiempo para el paciente y la reducción de agendas de trabajo. Esto es algo que nosotros propusimos desde la primera reunión, antes incluso de que hubiera huelga”, ha señalado Ayuso. La propuesta de la Consejería de Salud madrileña es un límite de 34 pacientes para los médicos de familia y 24 para los pediatras. Estos ratios están por encima de los ofrecidos en otras regiones y sirvieron para paralizar huelgas, incluso antes de que empezaran. De hecho, este mismo jueves se ha puesto en marcha un proyecto piloto con esos 34 pacientes para médicos y 24 para pediatras en Centros de Salud.
En el caso de Extremadura, el Sindicato Médico de Extremadura (Simex)decidió desconvocar este pasado lunes la huelga de médicos que estaba prevista para el 26 y 27 de enero. La propuesta trasladada desde de la administración sanitaria extremeña, respecto al límite de la agendade pacientes que podrá atender un facultativo, se fijó en 36 en médicos y 28 en pediatras de Atención Primaria, cifras de carga laboral superiores a la oferta madrileña. Por otro lado, lo mismo encontramos en los datos de Aragón, donde los sindicatos convocantes suspendieron la huelga con una oferta de 36 pacientes diarios para los médicos de familia y 29 para pediatras de la región.
En otras comunidades los sanitario tienen un trabajo mucho más cargado y ahora van a comenzar a abrir por las tardes, algo que ya se viene haciendo en Madrid desde hace mucho tiempo
En Andalucía, la desconvocatoria de la huelga de Atención Primariaque la organización sindical SMA tenía programada para el próximo 27 de enero, llegó de la mano de una limitación de agenda para los facultativos andaluces de 35 consultas para médicos de familiay 25 para los pediatras, de nuevo, ratios de carga superiores a la propuesta madrileña a Amyts. Idéntica propuesta que la vivida en las reuniones deCantabria, donde los médicos de Atención Primaria decidieron en asamblea, el pasado 16 de noviembre, aplazar la huelga que venían desarrollandoa la espera de firmar un acuerdo con la Consejería de Sanidad cántabra, dirigida por Raúl Pesquera, y que contemplaba agendas con 35 pacientes por profesional, tanto en médicos como en pediatras.
A la vista de estos datos, resulta mucho más complicado comprender por qué en la Comunidad de Madrid la huelga se viene prolongando desde el pasado mes de noviembre y continúa, a día de hoy, afectando al ciudadano madrileño. “En otras comunidades los sanitario tienen un trabajo mucho más cargado y ahora van a comenzar a abrir por las tardes, algo que ya se viene haciendo en Madrid desde hace mucho tiempo. Es evidente que aquí ocurre algo diferente”, ha sentenciado la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, en su última intervención.