El consejero de Hacienda y Función Pública de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquety, ha anunciado que el Consejo de Gobierno ha aprobado medidas de contención del gasto “para poder hacer frente a la disminución de ingresos generada por el bloqueo de las entregas a cuenta, y garantizar así tanto la prestación de los servicios públicos como el cumplimiento de los objetivos de estabilidad”.
En este sentido, se ha dado luz verde a la retención de 217 millones de euros que tienen como objetivo “priorizar las partidas de gasto social relacionadas con Sanidad, Educación y Servicios Sociales”. En concreto, el fin es “dejar de ejecutar aquel gasto que no afecta a servicios básicos para poder seguir prestando los servicios públicos de los que disfrutan los madrileños”.
El Gobierno regional advierte que el retraso en la aprobación de los PGE "repercute directamente a las cuentas públicas regionales para 2020, ya que se desconoce la previsión de ingresos para el próximo año"
Al mismo tiempo, Fernández-Lasquetty ha detallado que el Gobierno regional contempla “habilitaciones de crédito por valor de 177 millones de euros, que permitirán cubrir gasto que contabilizaba como déficit, mejorando así tanto la tesorería como el cumplimiento de los objetivos de estabilidad presupuestaria”.
RETRASO DE LOS PRESUPUESTOS DE 2020
Por otra parte, el consejero de Hacienda ha avanzado que la Comunidad de Madrid va a retrasar la aprobación de los presupuestos autonómicos de 2020 “ya que la única base disponible ahora mismo para diseñar las próximas cuentas públicas es la correspondiente a 2018”.
Fernández-Lasquetty: "El objetivo del Gobierno regional es “que los madrileños no sufran las consecuencias de la inacción y deslealtad del Gobierno de España con las comunidades autónomas"
Desde esta región lamentan que “la convocatoria de elecciones nacionales alarga la aprobación de unos nuevos presupuestos generales del Estado (PGE)”. Se trata de una situación que según la región “repercute directamente a las cuentas públicas regionales para 2020, ya que se desconoce la previsión de ingresos para el próximo año, lo que dificulta la elaboración de unas nuevas cuentas públicas”.
En este sentido, Fernández-Lasquetty ha subrayado que el objetivo del Gobierno regional es “que los madrileños no sufran las consecuencias de la inacción y deslealtad del Gobierno de España con las comunidades autónomas por llevar más de un año sin convocar el Consejo de Política Fiscal y Financiera, por tener bloqueadas las entregas a cuenta y por no haber comunicado los gobiernos regionales una previsión de ingresos para 2020 para la elaboración de los presupuestos”.