El Hospital La Luz ha puesto en marcha la Unidad de Pruebas Funcionales Digestivas para llevar a cabo exámenes que diagnostiquen trastornos motores esofágicos como la acalasia, el espasmo esofágico distal, la enfermedad por reflujo o la obstrucción al flujo en la unión esófago-gástrica (UEG).
El Servicio de Aparato Digestivo del Hospital La Luz ha puesto en marcha pruebas como la manometría esofágica de alta resolución y la pHmetría ambulatoria para tratar estas afecciones. La doctora Virginia Matallana, médico especialista en aparato digestivo y trastornos motores y funcionales digestivos, ha afirmado que estas enfermedades producen síntomas como la dificultad para tragar, el dolor durante la deglución, el dolor torácico, ardor o regurgitación.
"Son exámenes diagnósticos que estudian los movimientos del esófago y del esfínter esofágico, que nos permiten ver sus presiones y cómo se comporta este órgano cuando tragamos, así como los niveles de reflujo ácido que pasa del estómago al esófago", señala la doctora Matallana
"Son exámenes diagnósticos que estudian los movimientos del esófago y del esfínter esofágico, que nos permiten ver sus presiones y cómo se comporta este órgano cuando tragamos, así como los niveles de reflujo ácido que pasa del estómago al esófago", señala la doctora Matallana. Estas pruebas, sencillas de realizar, no necesitan de sedación. La manometría esofágica tiene una duración de 15 minutos en la que el especialista coloca una sonda fina por la nariz del paciente mientras bebe sorbos de agua. Sin embargo, en la pHmetría la sonda está conectada a un holter que graba durante 24 horas al paciente, éste tendrá que hacer una vida normal durante ese día y deberá de anotar en un diario el registro de comidas y síntomas que tenga.
Otra de las funciones que tiene la Unidad de Pruebas Funcionales Digestivas es estudiar las enfermedades anorrectales como el estreñimiento, la incontinencia fecal, el dolor anal, la fisura anal crónica, etc., para ello llevarán a cabo pruebas como la manometría anorrectal de alta resolución.
La doctora Matallana señala que la manometría anorrectal nos permite estudiar la actividad motora del canal anal y del movimiento de los músculos esfinterianos colocando una sonda fina que no provoca efectos adversos y que es útil para realizar una valoración prequirúrgica de la región anorrectal. No obstante, el tratamiento de estos trastornos pueden realizarse reeducando los compartimientos previsivos del canal anal utilizando un biofeedback con la manometría.