La huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria comienza este lunes una nueva semana marcada por el progresivo descenso en el seguimiento por parte de los facultativos. Tras un discreto comienzo desde su reinicio, con un seguimiento del 5,35% el pasado jueves (día de su comienzo) y 5,22% el viernes, los datos parecen seguir a la baja. Así, los datos de participación en los paros de este lunes se limitan al 3,78% de seguimiento en el turno de mañana.
De este modo, el sindicato Amyts no parece estar logrado el seguimiento esperado, en una huelga que amenazaba con movilizar a más de 5.000 médicos y pediatras del sistema madrileño de Salud. Los datos indican un creciente descenso en la participación de los profesionales, con una caída desde el 5,35% del reinicio de la huelga, el pasado jueves, hasta 3,78% registrado esta mañana.
La situación parece estar en un periodo de punto muerto, tras no haber fructificado la reunión del miércoles pasado entre la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, encabezada por Enrique Ruiz Escudero, y el Comité de Huelga. Desde la administración madrileña hicieron una propuesta de mejora en las condiciones de los profesionales de Atención Primaria basada en un complemento retributivo por la carga asistencial por ser categoría deficitaria a médicos de familia y pediatras, un complemento vinculado a la absorción de demanda por encima de 35 pacientes en el caso de médicos y de 25 en el de pediatras, sumado a la organización de las agendas. Además, se ofrece un tercer complemento para puestos de difícil cobertura en el turno de tarde.
Esta demanda de la subida lineal, según consideran desde la Consejería está fuera del “ámbito de negociación”. De este modo, el propio Escudero ya manifestó la semana pasada lo que considera una “falta de voluntad de Amyts para negociar una salida a la huelga"
La Consejería de Sanidad, señalaban que su última propuesta suponía " una mejora en el tiempo que podía dedicar cada profesional al paciente o que aquellos profesionales que más pacientes ven pudieran tener una mejor remuneración". Estos ofrecimientos iban en la línea de solucionar las demandas del sindicato médico a la hora de reducir la sobrecarga de trabajo por parte de los facultativos. Por el otro lado, Amyts reclama una una subida lineal para todos los médicos de familia y pediatras de 479€, independientemente de su carga de trabajo. Esta demanda de la subida lineal, según consideran desde la Consejería está fuera del “ámbito de negociación”. De este modo, el propio Escudero ya manifestó la semana pasada lo que considera una “falta de voluntad de Amyts para negociar una salida a la huelga".
Enrique Ruiz Escudero, apuntaba la semana pasada ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo con el sindicato Amyts que lo que han visto es “algo que ya escuchamos en el audio de una de las personas que forma parte de ese comité de huelga tratando de llevarla hasta el mes de mayo y también, pudimos ver una convocatoria de concentración para el día 18. Esto es algo que define claramente la actitud previa antes de esta reunión". En la misma línea se pronunció la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que alertaba de un interés político en esta huelga, afirmando que los médicos de Atención Primaria que están impulsando la huelga en la sanidad madrileña son solo "una parte" que está "devolviendo favores políticos" sin ganas de acordar. "Estamos en campaña y creo que tienen muy pocas ganas de resolver todo”, señalaba Ayuso.
En este punto y ante el escaso seguimiento de la huelga, la Comunidad de Madrid mantiene su “mano tendida” y su deseo de que el Comité de Huelga se avenga a dar por buenas las propuestas de Sanidad y queda a disposición del sindicato para mantener nuevas reuniones
En este punto, y ante el escaso seguimiento de la huelga, la Comunidad de Madrid mantiene su “mano tendida” y su deseo de que el Comité de Huelga se avenga a dar por buenas las propuestas de Sanidad y queda a disposición del sindicato para mantener nuevas reuniones para solucionar un desencuentro que afecta a los pacientes madrileños, más si cabe, en un momento de picos por enfermedades respiratorias y gripe, y con la amenaza de estallido de Covid-19 en China y la variante Kraken, que ya ha llegado a España.
REFUERZO EN EL ZENDAL
En paralelo al transcurso de la huelga, la Comunidad de Madrid ha continuado trabajando para evitar posibles saturaciones en las unidades de Urgencias de los hospitales madrileños. De este modo, el pasado viernes desde la Comunidad se anunció el traslado de pacientes al Hospital público Enfermera Isabel Zendal. Con ello pretenden amortiguar la aparición de picos en los casos de gripe y enfermedades respiratorias que vienen produciéndose en estas fechas invernales.
La administración, presidida por Isabel Díaz Ayuso, ha habilitado el pabellón 1 del Hospital Zendal, donde se irán habilitando camas progresivamente dependiendo de las necesidades asistenciales que surjan. En estos momentos el hospital cuenta con un equipo de 187 profesionales en diferentes áreas. Está medida va en la línea del Plan de Invierno que el Servicio Madrileño de Salud ha venido desarrollando desde el pasado mes de diciembre para ampliar las plantillas de los hospitales públicos con más de 1.300 profesionales sanitarios, a los que hay que sumar cerca de 350 contrataciones autorizadas en el Área de Pediatría que se produjeron con motivo del aumento de casos de bronquiolitis en niños.