El Hospital Universitario General de Villalba incorporó hace más de una década la oferta asistencial de Geriatría, integrada en su Servicio de Medicina Interna, debido al aumento de esperanza de vida, el envejecimiento de la población y la cronicidad de las enfermedades.
Sumadas a las cuestiones que caracterizan a esta población en España, cabe destacar que la Geriatría ha vivido un importante auge desde la pandemia del Covid-19 debido a los importantes efectos que tuvo sobre las personas mayores. Así, la Dra. Nuria El Kadaoui, jefa del Servicio de Geriatría del hospital villalbino, resalta que, tras la pérdida de socialización y de estímulos físicos y cognitivos provocada por el confinamiento, las personas de la tercera edad sufrieron una pérdida importante de sus capacidades y de su calidad de vida.
La geriatría ha vivido un importante auge desde la pandemia por Covid-19
“Aunque algunos de estos pacientes han podido volver a su vida normal, otros tantos siguen presentando dolor crónico, deterioro funcional o inestabilidad de la marcha como consecuencia de la falta de movimiento y pérdida de capacidades cognitivas debido a la disminución de los estímulos en la esfera mental”, apunta la especialista, añadiendo que, “en estas circunstancias, los geriatras han cobrado un papel protagonista en la contención o mejora de los efectos secundarios del aislamiento”.
El principal pilar y valor diferencial de la Geriatría en este hospital es la humanización de la atención que ofrece a sus pacientes, tanto a los ingresados como a los que acuden a las consultas o al Hospital del Día. En ese sentido, la Dra. El Kadaoui asegura que el objetivo no es otro que “ofrecer una atención integral a estos pacientes atendiendo su esfera cognitiva, emocional y física, así como que tengan una estancia confortable”.
Asimismo, para asesorar a los pacientes y extender sus cuidados más allá del centro, sus tres especialistas en Geriatría disponen de una consulta externa abierta a Atención Primaria y a los centros sociosanitarios, que ofrecen asistencia en salud mediante la figura del geriatra de enlace y un enfermero de Continuidad Asistencial tras el alta de los pacientes.
Dra. El Kadaoui: “Aunque algunos de estos pacientes han podido volver a su vida normal, otros tantos siguen presentando dolor crónico, deterioro funcional o inestabilidad de la marcha"
Estos profesionales, además, colaboran con los Servicios de Cirugía Ortopédica y Traumatología del hospital, con el objetivo de ofrecer un abordaje adaptado a los pacientes en los casos de fractura de cadera, una patología con alta prevalencia en esta población y que puede presentar importantes complicaciones. Para ello, el equipo cuenta con un geriatra especializado que centra su actividad asistencial en esta patología, con el objetivo de ofrecer un abordaje integral que permita al paciente llegar en las mejores condiciones clínicas a la cirugía y que el proceso postoperatorio tenga los mejores resultados. Una labor que ha sido reconocida, por segundo año consecutivo, por el Registro Nacional de Fracturas de Cadera por la calidad de su atención.
Por último, hace varios años se puso en marcha el Programa de Fragilidad, dirigido a evitar el deterioro funcional en los pacientes mayores durante su estancia hospitalaria, basado en 3 ejes: la identificación precoz de los pacientes que más riesgo tienen de presentar deterioro, la aplicación de acciones para evitar el deterioro funcional en el paciente y la implementación de un plan de prevención del delirium para disminuir el riesgo de cuadro confusional. Todo ello para que cuando el paciente esté dado de alta, su situación funcional sea lo más parecida posible a la que tenían en el domicilio de forma previa a su hospitalización.