El Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital General Universitario Gregorio Marañón ha patentado un cemento óseo con antibióticos microencapsulados destinado a las infecciones de prótesis articulares.
Este método se basa en aislar el antibiótico durante el proceso de polimerización del cemento óseo, cuando fragua, para permitirle conservar sus propiedades físicas y, a su vez, poder emplear el tratamiento elegido. En este proyecto participan los traumatólogos del Hospital Gregorio Marañón, Javier Vaquero, PabloSanz y Esther Carbó, en colaboración con el Departamento de Ingeniería Mecánica de la Universidad Pontificia Comillas y el Instituto INESCOP.
Según explican los profesionales del Gregorio Marañón, “en el tratamiento de las infecciones de prótesis articulares juegan un papel fundamental los espaciadores de cemento óseo al liberar antibióticos localmente en el sitio de la infección. La rifampicina es un antibiótico de gran interés en estas infecciones, que ya se emplea por vía intravenosa y oral. Habíamos intentado añadir rifampicina al cemento óseo para aumentar las posibilidades de éxito del tratamiento, pero no había sido posible hasta este momento ya que al añadir rifampicina al cemento óseo se inhibía la reacción de polimerización del mismo”.
“En el tratamiento de las infecciones de prótesis articulares juegan un papel fundamental los espaciadores de cemento óseo al liberar antibióticos localmente en el sitio de la infección"
Por esta razón, explican desde el Servicio de Cirugía OrtopédicayTraumatología, se centraron en diseñar un método para microencapsular la rifampicina en diferentes polímeros y así llegar a conseguir que el cemento óseo adquiriese unas propiedades mecánicas adecuadas para su uso en la fabricación de espaciadores para las infecciones de prótesis articulares.
En cuanto a la idea de gestionar esta patente, los traumatólogos explican que todo comenzó con la tesis doctoral de Esther Carbó “Estudio experimental de la utilización de rifampicina microencapsulada en el polimetilmetacrilato: propiedades químicas, mecánicas y microbiológicas”, que además, ha sido dirigida por Javier Vaquero y Pablo Sanz.
A partir de esta invención, el hospital madrileño profundizó en el estudio de la microencapsulación de otros antimicrobianos (antibióticos y antifúngicos) que tampoco podían utilizarse en el cemento óseo porque alteraban sus propiedades mecánicas o porque no eluíancorrectamente del cemento, perdiéndose su actividad antimicrobiana. Pero la microencapsulación ha sido la solución a este problema, permitiendo la obtención de un cemento óseo apto para fabricación de espaciadores en quirófano.
El proyecto ha sido reconocido con varios premios, entre ellos, la ayuda a proyecto de inicio a la investigación en Cirugía Ortopédica y Traumatología de la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología (SECOT) 2015, el Premio Fundación SECOT de investigación básica en Cirugía Ortopédica y Traumatología 2016, y la Beca Mutual Médica de investigación 2017. También ha dado lugar a diversas publicaciones científicas en revistas nacionales e internacionales.