La Dra. Cristina Caramés, jefa asociada y coordinadora del Área de Tumores Digestivos del Servicio de Oncología Médica de la Fundación Jiménez Díaz dirige el proyecto “HOPE, HOspital de Día PErsonalizado”, una innovadora iniciativa asistencial que trata de mejorar la experiencia y la calidad de vida del paciente junto con el aumento de la eficacia y la seguridad clínica. Concretamente, el proyecto se basa en la innovación tecnológica y en la implantación de una unidad de práctica integrada en el tratamiento del cáncer.
“Crea un equipo integrado por todos los actores del proceso (Enfermería, oncólogos, profesionales de Sistemas de la Información, Laboratorio y farmacéuticos) para coordinar los actos antes y entorno al paciente oncológico que requiere tratamiento en Hospital de Día (análisis de sangre, espera de resultado, visita a la consulta de la enfermera y el oncólogo, preparación del tratamiento por parte del Servicio de Farmacia, dispensación del mismo…) y eliminar actos y esperas entre los mismos que no le aportan valor, ni a él ni a los profesionales sanitarios, para que sean estos y el equipamiento clínico los que se muevan en torno al paciente, al sillón en el que recibe el tratamiento, y no viceversa”, explica la responsable de la iniciativa.
Los beneficios pasan por la reducción del 97% del tiempo total en el que se tarda en recibir el tratamiento, de tiempos medios entre 9 y 13 horas a un promedio de 2 a 3 horas
Con el objetivo de explicar el proyecto, la Fundación Jiménez Díaz ha grabado un vídeo que cuenta con la participación de sus promotores y de sus auténticos protagonistas, cinco pacientes oncológicos incluidos en el proyecto que demuestran el impacto positivo que ha tenido en todos ellos, y que estrenó ayer en su Aula Magna con motivo de la próxima celebración del Día del Cáncer, este sábado, 4 de febrero.
La Dra. Caramés ha querido recalcar que no solo se preocupan en que el paciente se cure o reciba el tratamiento más adecuado, sino en cómo este interfiere en su vida cotidiana. Por parte de los pacientes, han reportado una mejora significativa en su experiencia de atención oncológica en el NPS (Net Promotor Score), una herramienta que indica el grado de satisfacción del usuario a través de la pregunta sobre si recomendarían el servicio.
“Hemos observado una mejora drástica en los resultados clínicos, con una disminución de hasta el 38% en los ingresos hospitalarios por toxicidad grave del tratamiento del cáncer”, asevera la jefa asociada del Servicio de Oncología Médica de la Fundación Jiménez Díaz.
Los beneficios pasan por la reducción del 97% del tiempo total en el que se tarda en recibir el tratamiento, de tiempos medios entre 9 y 13 horas a un promedio de 2 a 3 horas. Cifras que junto a la disminución del 62% de las citas innecesarias entre ciclos, ha provocado que los oncólogos tengan más tiempo para centrarse en lo realmente clave, ofrecer una atención digna.
CLAVES
Para poder adaptar todo este proceso a la realidad, HOPE incorporó cuatro aspectos fundamentales: la estructuración de la recogida de datos clínicos en consonancia con la evidencia científica y los programas de calidad a fin de reducir los errores derivados de la variabilidad individual; los sistemas “pointof care” en el Hospital de Día para obtener los resultados del análisis de sangre en menos de cinco minutos; la automatización de la solicitud de prestaciones y las citaciones para unificar cuatro citas en una; y la integración del Portal del Paciente con la historia clínica electrónica (HCE).
“HOPE ha demostrado que creando un entorno de trabajo más seguro y confortable hemos mejorado nuestra relación con ellos y su experiencia”
La última incorporación al proyecto ha sido la Asistencia Inteligente en Oncología, AI-ON, que se trata de un asistente virtual para la atención de síntomas frecuentes y resolución de dudas en tiempo real. Basado en un modelo de inteligencia artificial, utiliza un ‘chatbot’ integrado en el Portal del Paciente y en la HCE del usuario.
“HOPE ha demostrado que trabajando en equipo, creando un entorno de trabajo más seguro y confortable e implicándonos más en el proceso de salud de los pacientes, hemos mejorado nuestra relación con ellos y su experiencia”, concluyó la Dra. Caramés.