La Comunidad de Madrid se sitúa como la región más longeva de España, con una esperanza de vida de 84,6 años. Atendiendo a detalles concretos, y en base a los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la esperanza de vida se situó en el año 2021 en los 83,06 años.
En el caso de las mujeres esta se posiciona en los 85,83 años, mientras que en los hombres en los 80,24 años. Unos datos que, a juicio a Organización Mundial de la salud (OMS), sitúan a nuestro país como el cuarto con mayor esperanza de vida, por detrás de Japón, Estado más longevo con una media de esperanza de vida de 84,4 años; Suiza (83,8 años) y Singapur (83,6 años).
Los 84,6 años de media posicionan a la autonomía que preside Isabel Díaz Ayuso como la comunidad más longeva de España superando, incluso, la esperanza de vida de Japón
De regreso a la región madrileña, los 84,6 años de media posicionan a la autonomía que preside Isabel Díaz Ayuso como la comunidad más longeva de España superando, incluso, la citada de esperanza de Japón. A Madrid le sigue Navarra (84,3 años) y Castilla y León (83,9 años). En el lado contrapuesto destacan las cifras de Ceuta (78,2), Melilla (79,4) y Andalucía (81,4).
La esperanza de vida se relaciona con la incidencia de las principales causas de mortalidad, que en España son el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. Le siguen las dolencias no trasmisibles como la diabetes mellitus, las patologías respiratorias crónicas, los problemas de salud mental y las enfermedades músculo-esqueléticas.
La esperanza de vida se relaciona con la incidencia de las principales causas de mortalidad, que en España son el cáncer y las enfermedades cardiovasculares
También conocida como expectativa de vida, está determinada por factores como la dieta, el ejercicio físico, el consumo de tabaco y alcohol o el bienestar emocional, así como por amenazas para la salud sobrevenidas como la pandemia de COVID-19.
Las estrategias de prevención y promoción de la salud que abordan los factores determinantes de las enfermedades más prevalentes desde la infancia y a lo largo de la vida y las políticas sanitarias que facilitan escoger las opciones más saludables y el control de los nuevos riesgos para la salud, contribuyen no sólo a aumentar este promedio, sino también a que se goce en todo ese tiempo de buena salud.