El Consell de Govern de Baleares ha autorizado a la Fundación Banco de Sangre y Tejidos de las Islas Baleares (Fbstib) a proceder a la contratación de los suministros de reactivos que tienen por objetivo detectar los VHB (hepatitis B), VHC (hepatitis C) y VIH (inmunodeficiencia humana) por técnicas de amplificación de ácidos nucleicos.
Una contratación que ha sido propuesta por la Consellería de Salud y Consumo y que cuenta con un presupuesto de 1.519.155 euros con una duración de 36 meses. Este importe queda distribuido de la siguiente forma: en el año 2020, 421.987,50 euros, en el año 2021, 506.385,00 euros, en el año 2022, 506.385,00 euros y en el año2023, 84.397,50 euros.
Mediante el uso de esta técnica es posible detectar a través de la sangre la presencia directa de los virus VHB, VHC y VIH en las donaciones de sangre que recoge el Banco de Sangre y Tejidos. Una medida que incrementa notablemente la seguridad transfusional.
El pasado año, en el laboratorio de biología molecular se analizaron un total de 36.963 donaciones procedentes del centro, del equipo móvil, autotransfusiones y unidades procedentes de Menorca, Ibiza y Formentera.
Mediante el uso de esta técnica es posible detectar a través de la sangre la presencia directa de los virus VHB, VHC y VIH
El Banco de Sangre y Tejidos es la entidad responsable de la planificación y promoción de las campañas de donación, la extracción, el análisis, el fraccionamiento, el almacenamiento, la distribución y el transporte de la sangre dada, y de garantizar la máxima calidad y seguridad, desde la atención al donante hasta la transfusión a los pacientes en las Illes Balears.
Todas las donaciones de sangre de las Illes Balears se remiten a la sede de la Fbstib, donde se separan en los diferentes componentes y se analizan y se distribuyen a los hospitales. De este modo, se garantiza que todas las transfusiones tengan el mismo nivel de calidad y seguridad transfusional.
PARTIDA DE 889.200 EUROS PARA VACUNAS HEXAVALENTES
El Consell de Govern también ha autorizado el gasto relativo al expediente de prórroga para 2020 del contrato para el suministro de la vacuna hexavalente (contra la hepatitis B, la difteria, el tétanos, la tos ferina acelular, la poliomielitis inactivada y la Haemophilus influenzae tipo B conjugada), el cual deriva del Acuerdo marco para la adquisición de vacunas del calendario.
La partida total aprobada asciende a 889.200 euros que se traducirán en la compra de 30.000 dosis con las que poder satisfacer la demanda.
La vacuna hexavalente se recomienda aplicarla en tres dosis a los 2, 4 y 11 meses de edad
De acuerdo a la última actualización del calendario de vacunación infantil de las Islas Baleares, la vacuna hexavalente se recomienda aplicarla en tres dosis a los 2, 4 y 11 meses de edad.
El calendario de vacunaciones es establecido por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud por consenso tanto en lo relativo a las pautas de administración, los antígenos que deben administrase y la población a la que van dirigidas. Las vacunas de los programas poblacionales se deben administrar a unas edades y durante un periodo determinados, lo que conforma el calendario de vacunación.
Motivos por los que es de vital importancia la adquisición anual de las vacunas, además de calcular el presupuesto aproximado del gasto necesario para su compra con el objetivo de inmunizar tanto a la población infantil como adulta.
Según los datos ofrecidos por el Servicio de Coordinación de Vacunas de la Dirección General de Salud Pública y Participación, hasta el pasado 15 de noviembre se han puesto un total de 26.592 dosis de vacunas hexavalentes en las Islas Baleares: en Mallorca 21.220; en Menorca, 1.682, y en Ibiza y Formentera, 3.690.
En 2018 en las Illes Balears se administraron 31.385 dosis de la vacuna hexavalente: 24.350 en Mallorca, 2.430 en Menorca y 4.605 en las Pitiüses.
Cabe recordar que la mayoría de las enfermedades prevenibles por vacunación que están incluidas en los programas de vacunación, evitan estas patologías en la infancia y en la adolescencia. Hecho que se traduce en un beneficio en el incremento de años y calidad de vida que las intervenciones que se realizan en la edad adulta.