El Hospital General de Mallorca ha inaugurado Unidad de Intervención Logopédica dirigida a niños con fisura labiopalatina, completando así un equipo sanitario interdisciplinario. Esta iniciativa responde a una demanda histórica de la Asociación de Fisurados de Baleares (AFIBAL) y se suma al trabajo que ya realizaban pediatras, cirujanos maxilofaciales, otorrinolaringólogos y odontólogos en el archipiélago.
Cada año, entre doce y quince niños nacen con esta malformación en Baleares. Hasta ahora, recibían atención en una unidad específica del hospital de referencia y seguimiento odontológico y ortodóntico desde Atención Primaria. Con la incorporación del servicio de logopedia, los menores contarán con una atención más completa y accesible dentro del sistema de salud público.
La consejera de Salud, Manuela García, ha visitado las nuevas instalaciones acompañada por la directora gerente de Son Espases, Cristina Granados, y el subdirector de Humanización del Servicio de Salud, Gabriel Rojo. Durante la visita, García ha destacado la importancia de este servicio, dado que los tratamientos de logopedia pueden extenderse desde la infancia hasta la edad adulta, dependiendo de las intervenciones quirúrgicas necesarias y la evolución clínica de cada paciente.
El tratamiento inicial consta de un ciclo de tres meses, seguido de un periodo de descanso de otros tres meses
El equipo interdisciplinario de Son Espases se encargará de derivar a los niños que necesiten terapia logopédica al nuevo servicio del Hospital General. El tratamiento inicial consta de un ciclo de tres meses, seguido de un periodo de descanso de otros tres meses. Posteriormente, los especialistas evaluarán la evolución de cada paciente para determinar la necesidad de continuar con la terapia.
Para garantizar la calidad de la atención, la Gerencia de Son Espases ha proporcionado formación específica en terapia del habla a tres logopedas del Hospital General. Este curso intensivo fue impartido en Barcelona por la Asociación de Fisurados de Cataluña (FICAT), una entidad de referencia en el tratamiento de fisuras labiopalatinas.
Desde finales del verano pasado, el servicio ha atendido a una docena de pacientes y se prevé que cada año se atiendan entre doce y quince casos nuevos.