El Consejo de Gobierno de Baleares ha otorgado al Servicio de Salud la autorización para tramitar el acuerdo marco para la contratación de la prestación del servicio de radioterapia de protonesa pacientes que derive por un valor máximo estimado de 925.524 euros por dos años.
En los últimos años, se ha desarrollado un nuevo tipo de tratamiento radioterápico para el cáncer infantil, que utiliza partículas pesadas, denominadas protones, en lugar de emplear fotones. Guiados correctamente, los protones tienen la particularidad de garantizar la liberación localizada de energía minimizando los efectos nocivos sobre los tejidos sanos y concentrando dosis altas de radiación en el tejido tumoral.
La radioterapia con protones permite minimizar los efectos nocivos en los tejidos sanos y concentrar dosis altas de radiación en el tejido tumoral
Gracias a esta característica, la radioterapia con protones está particularmente indicada para tratar los tumores profundos, sobre todo cuando hay que preservar estructures críticas o órganos sanos, cosa que reduce al mínimo las secuelas de la exposición a fotones (tumores secundarios y daños en órganos y estructuras vitales). En la edad pediátrica, la exposición a fotones, utilizados en radioterapia clásica, puede suponer efectos secundarios importantes, tanto en la fase aguda de la enfermedad como largo plazo, como por ejemplo la alteración del crecimiento o de la esfera cognitiva y neoplasia radio inducida.
Por todo esto, es manifiesto que disponer de una opción radioterápica (terapia de protones o PRT) que garantice más eficiencia que la radioterapia de fotones y que en conjunto tenga menos efectos secundarios representa una alternativa válida en la estrategia oncológica, sobre todo para los pacientes pediátricos.
Hasta el año 2019, estos pacientes eran derivados a clínicas con terapia de protones en Suiza y Alemania. El último año, los pacientes fueron derivados a clínicas en España que habían puesto en marcha esta terapia.