Al igual que han solicitado los presidentes de País Vasco y Extremadura, en la tarde de este viernes ha sido Adrián Barbón, presidente del Principado de Asturias, quien ha solicitado al Gobierno central que declare el estado de alarma en esta comunidad autónoma con el fin de controlar la transmisión del coronavirus.
Según el líder regional, esta petición ha llegado tras comprobar que las últimas decisiones tomadas “no están teniendo efectos positivos”. De hecho, este viernes han notificado un récord de contagios, 323, que es la cifra más alta diaria desde el inicio de la pandemia. Por ello, el comité de crisis de Covid-19 ha solicitado a Pedro Sánchez que lo apruebe para Asturias.
Asturias ha solicitado “garantías jurídicas” a organismos regionales para aprobar un toque de queda en la región mientras hasta que se decrete el estado de alarma
Esta herramienta sería, según Barbón, “el colchón y la respuesta jurídica necesaria a una situación de crisis epidemiológica y controlar una segunda ola que viene mucho más fuerte”. El presidente del Principado ha defendido que “dijimos que no podíamos quedarnos inmóviles y que tomaríamos cualquier tipo de decisión, todo lo drásticas que fueran para contener los contagios y salvar vidas”.
Y mientras el Gobierno central concede esta solicitud, que tendría que ser respaldada por el Consejo de Ministros y enviada al Congreso de los Diputados, Asturias ha solicitado “garantías jurídicas” a organismos regionales para aprobar un toque de queda en la región. De esta manera, apuesta por restringir los movimientos durante la noche.
CIERRE DE OVIEDO, GIJÓN Y AVILÉS
Por otra parte, Adrián Barbón ha detallado que como consecuencia del plan aprobado este jueves en el Consejo Interterritorial, y al comprobar que Asturias se encontraría “entre los niveles 3 y 4” de máximo riesgo, es necesario “tomar las medidas asociadas”. Entre ellas, el cierre de toda actividad comercial a las 22:00 horas y el de la hostelería a las 23:00 horas.
Dichas medidas se aplicarán a todo el Principado. No obstante, han detectado que actualmente la situación más problemática se da en Oviedo, Gijón y Avilés, por lo que han aprobado este mismo viernes una resolución en la que se decreta el cierre perimetral de estas tres ciudades.