La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha presentado este jueves, en sesión plenaria de las Cortes autonómicas, el Plan de Abordaje de las Listas de Espera Quirúrgicas, con el que pretende reducir, a finales de 2022, un 85% las demoras de más de 180 días.
El plan se publicará en el BOA de forma "inminente" y en él destacan la priorización de los pacientes con neoplasias, la participación de los pacientes y el mantenimiento de la colaboración público-privada. "El paciente es el centro del sistema", ha dicho.
El departamento quiere incrementar el rendimiento quirúrgico hasta un 69% por la mañana y un 61% por la tarde de forma progresiva hasta 2022, e incrementar las intervenciones programadas un 14% en 2022 respecto de 2019.
El departamento quiere incrementar el rendimiento quirúrgico hasta un 69% por la mañana y un 61% por la tarde de forma progresiva hasta 2022, e incrementar las intervenciones programadas un 14% en 2022 respecto de 2019
En una comparecencia a petición del PP, Sira Repollés ha recordado que "el sistema sanitario ha dejado a un lado la actividad programada" a raíz de la llegada de la pandemia de la COVID-19 "en Aragón, España y el resto del mundo", al crearse una situación "inestable y dinámica" que obliga a destinar los recursos a atender a los pacientes del coronavirus.
"Aun así se ha mantenido la actividad quirúrgica", ha puntualizado la consejera, quien ha apuntado que en noviembre se han contabilizado 7.450 pacientes en listas de espera, que "están disminuyendo".
El plan presentado es "realista y consensuado", ha afirmado Repollés, destacando algunos principios: que los tiempos de espera sean "adecuados" a las necesidades clínicas de los pacientes y mejorar la eficiencia del uso del equipamiento disponible; potenciar la cirugía mayor.
CRITERIOS
Para priorizar las intervenciones se tendrán en cuenta criterios como que los procesos sean neoplásicos, el impacto de la demora en la evolución de la enfermedad y el cumplimiento de los plazos establecidos en el Decreto de garantía de atención quirúrgica.
También, el tiempo necesario para la planificación de la operación, el estado del paciente, su situación clínica y la comorbilidad, así como la participación activa de los profesionales, la transparencia, la colaboración con otros centros públios y privados, y las decisiones compartidas con los pacientes.
LÍNEAS DE TRABAJO
Para llevar a cabo el plan de abordaje, Sanidad creará grupos de trabajo con responsables de servicios como anestesia, traumatología, cirugía general, cardiológica y de otorrinolaringología; se aprobarán nuevas instrucciones de gestión de listas de espera; cada centro pondrá en marcha una comisión de programación quirúrgica; se revisarán las listas para mejorar los niveles de actividad y rendimiento; se reorganizará la atención en UCI; se incrementará la colaboración con la Clínica MAZ y el Hospital Militar de Zaragoza y se informatizará el proceso quirúrgico.
Sobre la concertación con centros privados, Sira Repollés ha dejado claro que "en ningún momento" el Departamento se ha posicionado en contra, siempre que se utilicen todos los recursos de la red pública, y que "la relación con las privadas es excelente y sería una falta de responsabilidad no utilizar todos los recursos de la Comunidad para sacar adelante a los enfermos de las listas de espera". También se incrementarán las autoconcertaciones por la tarde.
En cuanto a las tarifas de la concertación, se abonan conforme a un Decreto específico de 2017 y son, por ejemplo, 720 euros por cataratas, 800 por varices en una pierna y 2.000 por una operación de menisco
En cuanto a las tarifas de la concertación, se abonan conforme a un Decreto específico de 2017 y son, por ejemplo, 720 euros por cataratas, 800 por varices en una pierna y 2.000 por una operación de menisco. En 2022 se destinarán 13.630.000 euros a este fin, lo que "viene a ser seis o siete céntimos de Zendal", en alusión al hospital de emergencias abierto esta semana por la Comunidad de Madrid.
Ha observado que, en sanidad, "la oferta es limitada, se basa en la disponibilidad de los profesionales" y que se tarda una media de 12 años en formarlos, tras lo que ha comentado que el Gobierno de Aragón ha aumentado un 20 por ciento las plazas MIR, lo que "no es fácil". A estas dificultades se suman el incremento de la demanda, el envejecimiento de la población, que los pacientes son cada vez más complejos y la variabilidad de la práctica médica.