El presidente del Colegio de Médicos de Zaragoza (COMZ), Javier García Tirado, y la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, han tenido una reunión este jueves, 27 de enero, para abordar los problemas que afronta el sistema sanitario aragonés. En el que ha sido el primer encuentro oficial desde que García Tirado tomara su cargo como presidente del COMZ, éste ha trasladado a la consejera su preocupación por la salud mental de los facultativos. También han participado en la reunión la secretaria del COMZ, Belén Lomba; el vicesecretario del COMZ, Javier Fuentes; el vicepresidente primero del COMZ, Manuel Cardiel; la vicepresidenta segunda del COMZ, Carmen Puig y el vicepresidente tercero del COMZ, Alfredo Pérez Lambán.
Tal y como informa el Colegio de Médicos zaragozano, uno de los problemas que preocupa enormemente a la institución, y que se ha trasladado en este encuentro, es la mella que la pandemia está haciendo en la salud mental de los profesionales sanitarios. "La brutal sobrecarga laboral, psicológica y física, excesivamente prolongada en el tiempo, ha llevado a la profesión a la extenuación y la frustración en términos generales. La población contempla con malestar profundo el empeoramiento de las demoras de las agendas y listas de espera, ya excesivas en el momento de desencadenarse la pandemia", apunta Javier García Tirado.
Es por esta razón que el COMZ ha pedido al Departamento de Sanidad medidas urgentes para poder atender a los profesionales que así lo requieran, así como la participación del Departamento en la financiación del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo en Aragón (PAIMA). Este programa, es “una herramienta fundamental” que lleva en marcha 20 años y que asiste de manera especializada a los colegiados afectados por trastornos mentales y/o adicciones. Desde 2009, el COMZ lo gestiona sin financiación pública, siendo una de las pocas instituciones colegiales que no cuenta con apoyo económico por parte de la administración.
García Tirado ha advertido a Sira Repollés que, a pesar de que la mayoría de los problemas de salud mental de los profesionales se verá en un tiempo, una parte de los trastornos ya están saliendo a la luz. Tanto es así, que este servicio del COMZ ha visto incrementadas las solicitudes de ayuda atendiendo en los últimos meses a 21 facultativos. De igual forma, el colegio también ha notado un aumento de las consultas atendidas a través del teléfono del servicio de atención psiquiátrica puesto en marcha para los colegiados afectados por la pandemia. Solo en el primer semestre de 2021 se atendieron cuatro, consultas frente a las 29 del segundo semestre de 2021.
"Cada nueva oleada supone un impacto sobre el sistema y una ralentización en las listas de espera"
En cuanto al seguro de Responsabilidad Civil sanitario que el Servicio Aragonés de Salud tiene contratado para afrontar las posibles negligencias médicas, se ha planteado la necesidad de buscar una opción de mejora que cubra además aquellas relacionadas con la Covid-19, ya que el seguro actual no lo contempla.
Por otro lado, el OCMZ ha recordado además a Sira Repollés las medidas solicitadas hace unos días al Gerente del Salud para liberar a los centros de salud de las pruebas diagnósticas de la Covid-19 y de las tareas burocráticas.
En cuanto a los hospitales, el colegio de médicos reclama "evitar ingresos innecesarios mediante la aplicación de criterios claros de hospitalización; concentrar la atención a pacientes Covid en centros hospitalarios de menor complejidad; asumir el manejo de pacientes con Covid que precisan de ingreso hospitalario por cualquier patología habitual en el área de hospitalización convencional correspondiente a la patología que presentan; y se ha planteado la necesidad de desarrollar de forma decidida la hospitalización domiciliaria. Se ha planteado también la necesidad de redimensionar y reestructurar las plantillas asistenciales de atención primaria muy especialmente, y de forma paralela a nivel hospitalario"
La institución colegial, más allá de las medidas urgentes y de mínimos que se necesitan para hacer frente a las olas de la coronavirus, exige otras de mayor calado y profundidad que pasan necesariamente por la recapitalización presupuestaria del sistema sanitario en todas sus áreas: personal, recursos materiales y tecnológicos, y nuevas infraestructuras. “No podemos postergar más todas las medidas necesarias. Cada nueva oleada supone un impacto sobre el sistema y una ralentización en las listas de espera. No se puede mantener esta situación de forma indefinida, porque el resto de patologías siguen estando ahí", ha concluido García Tirado.