Continúan las investigaciones sobre el brote de gastroenteritis que desde el fin de semana del 9 y 10 de septiembre afecta a la ciudad de Tarazona y que se ha extendido a otras localidades. Las Administraciones públicas han decidido segmentar el curso del río Queiles en varios tramos para realizar, a lo largo de esta semana, una búsqueda más a fondo de la causa de este brote.
El pasado jueves, se confirmó la presencia en el río Queiles del agente patógeno causante del brote, un protozoo del género Cryptosporidium, que se presenta en el medio acuático en forma de quiste. Desde entonces, Agentes de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón, efectivos del SEPRONA de la Guardia Civil y la Policía de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) han inspeccionado el río y las zonas aledañas al mismo, sin hallar hasta ahora ninguna actividad o hecho que pudiera haber ocasionado la contaminación por este patógeno.
El consejero de Sanidad, José Luis Bancalero Flores, ha destacado la “gran colaboración que hemos encontrado” por parte de todas las Administraciones públicas implicadas, en un encuentro que ha servido para abordar “todas las situaciones y escenarios posibles”. Bancalero ha destacado la “gran capacidad de reacción”, desde el primer momento, de la Administración local y autonómica, que ha permitido conocer el patógeno causante del brote y detectarlo en el agua.
Se van a tomar muestras del cauce del río Queiles para localizar el foco de contaminación, actuar sobre él y eliminarlo
El consejero ha detallado que los agentes del SEPRONA han llegado prácticamente hasta el nacimiento de Queiles “y no han detectado nada extraño que haga sospechar que hubiera algún vertido o actividad a lo largo de la ribera del río” que haya ocasionado la contaminación. “Tenemos que seguir investigando” y “esta semana se van realizar varios análisis a lo largo del trayecto de todo el río, para poder acercarnos a una solución más temprana que tardía”, ha enfatizado el consejero.
El titular de Sanidad ha manifestado que todas las hipótesis siguen abiertas sobre cuál ha podido ser el modo de contaminación, como filtraciones por lluvias torrenciales o vertidos. “No descartamos ninguna” y “lo principal es dar con el foco para solucionar este problema que tanto incomoda a la población”, ha insistido.
Sobre los posibles escenarios, el consejero ha señalado que es posible que se encuentre el foco y se actúe para eliminar la presencia del protozoo, o que no se halle el foco. En ese caso, y tras varios análisis negativos respecto a la presencia del quiste del protozoo en el agua, se suprimiría la restricción a la población en el suministro que existe ahora, algo que determinará la dirección general de Salud Pública, siguiendo la evidencia científica.
El brote de gastroenteritis de Tarazona suma hasta ahora 452 casos
Si los análisis siguen siendo positivos en la presencia del patógeno, “se mantiene la restricción”, ha dicho Bancalero. “Entendemos la incomodidad para la población”, pero deberán seguir aplicando las recomendaciones dadas por la dirección general de Salud Pública, “que está en permanente contacto con las Administraciones locales”.
El consejero ha recordado que ha habido también comunicación con la consejería de Sanidad de Castilla y León y con el Gobierno de Navarra. “Ellos están haciendo todo tipo de actuaciones que pudieran estar en su ámbito”, ha apuntado. Por su parte, tanto la CHE, como el SEPRONA tienen competencias para realizar acciones en todo el curso del río.
El brote de gastroenteritis de Tarazona tiene contabilizados hasta ahora 452 casos. Clínicamente, los pacientes presentan un cuadro de enfermedad leve, que cursa con diarrea y, excepcionalmente, con vómitos y fiebre.