El Hospital Materno Infantil Miguel Servet de Zaragoza ha puesto en marcha una campaña sobre el "síndrome del lactante zarandeado", con el objetivo de prevenir y sensibilizar. Así, los padres de los recién nacidos recibirán información acerca de esta condición, además de sobre otros cuidados esenciales en los primeros meses de vida.
El síndrome del bebé zarandeado es una lesión cerebral grave que se produce como consecuencia de sacudir con fuerza a un bebé o un niño de uno a dos años. Esta lesión destruye las neuronas cerebrales del niño e impide que el cerebro reciba suficiente oxígeno.
"El zarandeamiento en un niño pequeño que tiene una hipotonía, un tono más bajo a nivel del cuello, implica que haya un movimiento de la masa cerebral dentro del cráneo y eso puede provocar un cizallamiento de los vasos sanguíneos cerebrales", explica José Luis Peña, neuropediatra del Hospital Materno Infantil Miguel Servet.
José Luis Peña: "Los pediatras sabemos que el lactante zarandeado no siempre implica intención por parte del cuidador o de la familia de hacer daño al bebé"
Los zarandeos provocan que la cabeza del bebé sufra movimientos de aceleración y desaceleración rápidos que, a causa del gran tamaño de la cabeza en proporción al resto del cuerpo y a una musculatura débil del cuello, facilitan que se produzcan lesiones intracraneales o un traumatismo craneal. Esto puede derivar en consecuencias importantes a nivel neurológico, ceguera o incluso la muerte del bebé.
Sin embargo, estas situaciones suelen darse por accidente. "Los pediatras sabemos que el lactante zarandeado no siempre implica intención por parte del cuidador o de la familia de hacer daño al bebé. En ocasiones es desconocimiento y el no tener las suficientes herramientas para enfrentarse a un bebé que presenta un llanto inconsolable y que es muy difícil afrontar", añade el neuropediatra.
Por ello, la iniciativa del centro hace hincapié en el manejo del llanto y explica en qué consiste el síndrome del lactante zarandeado y cómo evitarlo. "Esta campaña pretende sensibilizar sobre cómo atender a un bebé que no cesa de llorar y cómo habría que reaccionar en estas situaciones para evitar un grave problema para el niño y que luego puede tener muchas repercusiones para todos", concluye el experto.
Este programa de prevención se inicia en la planta de Maternidad del Servet y tiene continuidad en la primera consulta de Pediatría en el centro de salud. Se trata de un proyecto de mejora consensuado con los profesionales de las Unidades de Neonatal, UCI Pediátrica, Lactantes, Neuropediatría, Maternidad y Pediatría de Atención Primaria, tanto del ámbito médico como de enfermería.