El encierro sindical en las oficinas del SALUD protagonizado por varios representantes de CCOO, UGT, y CSIF se ha saldado con la firma de un preacuerdo que pondrá fin a sus 'viernes negros' de protestas y sienta las bases para negociar sus demandas sanitarias.
A través de los 'viernes negros', las organizaciones sindicales reivindicaban que se llevasen a la Mesa Sectorial de Sanidad cualquier acuerdo, con el fin de que estos fuesen negociados con todos los sindicatos "sin excluir a las de mayor representación". Una de las principales demandas de las centrales sindicales es que el SALUD pague la carrera profesional a todos sus empleados públicos.
CSIF, CCOO y UGT reclaman su "legítimo puesto" en la Mesa General de Función Pública y en la Mesa Sectorial de la Sanidad y no aceptan que el Servicio Aragonés de Salud establezca "órganos de negociación bilaterales que carecen de representatividad, con organizaciones sindicales corporativas", haciendo referencia al acuerdo de fin de huelga firmado con CEMSATSE.