Este fin de semana hemos sumado una nueva cara al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. A falta de conocer el desenlace de la gobernabilidad en Murcia, ya sabemos cuáles son todos los consejeros y consejeras sanitarios de nuestro país. La última incorporación: José Luis Bancalero, consejero de Sanidad de Aragón.
La investidura del nuevo presidente de esta comunidad, Jorge Azcón (PP), no ha sido precisamente fácil. Las negociaciones de estos últimos meses tras el 28M han estado marcadas por las pretensiones del grupo autonómico de Vox de entrar en el gobierno. Si bien al comienzo no era un escenario deseable para Azcón, finalmente ha decidido contar con los votos del partido de Alejandro Nolasco en su investidura.
Así las cosas, y ya con el presidente habiendo tomado posesión, finalmente Bancalero se hace cargo de la sanidad aragonesa. Su legislatura estará marcada por algunos retos que han quedado derivados de la pandemia y otros nuevos a los que el presidente Azcón ya hizo referencia durante su debate de investidura.
El nuevo consejero tendrá que poner en marcha el Grado de Medicina en el campus de Teruel
El primero de ellos será una apuesta por "garantizar el bienestar de la sociedad", según las palabras de Azcón. Para ello el líder autonómico del PP proponía una mejora de la gestión de los recursos, ya que plantea una bajada de impuestos. Así, el nuevo consejero tendrá el gran reto de reorganizar las inversiones en materia sanitaria para poder garantizar los servicios. Igualmente, el nuevo presidente ha hecho referencias a un aumento de la colaboración público-privada.
Por otro lado, otro de los grandes retos que va a tener que acometer el nuevo consejero tiene que ver con los profesionales sanitarios. Azcón ya advirtió de la gran cantidad de profesionales que van a jubilarse en un futuro relativamente cercano. Por ello, la falta de médicos es ya un problema inminente que Bancalero tendrá que resolver durante su mandato como consejero.
La gran solución de Azcón para este problema pasaría por la formación de más sanitarios. Para ello, Bancalero tendrá que poner en marcha el Grado de Medicina en el campus de Teruel. Este proyecto, que ya estaba en el programa electoral del PP aragonés, se sumará además al adelanto de la presencia del grado completo en Huesca y a la ampliación de la oferta en el campus biosanitario de la capital altoaragonesa. "El objetivo está claro”, dijo Azcón, “aumentar el número de nuevos profesionales que nos pueden ayudar a mejorar la Sanidad del país, disponiendo de esta forma del personal que Aragón necesita, y muy especialmente en el medio rural".
Tendrá que llevar a cabo una profunda revisión de la gestión sanitaria de la comunidad si quiere implantar un modelo más colaborativo con la sanidad privada
Bancalero también tendrá que llevar a cabo una profunda revisión de la gestión sanitaria de la comunidad si quiere implantar un modelo más colaborativo con la sanidad privada. "La sanidad no es gratis", decía el presidente, "se financia con impuestos". Y si ésta no responde a las necesidades asistenciales de la población, con, por ejemplo, largas listas de espera, se necesitaría esta colaboración. "No resulta muy útil hablar de la sanidad privada como si compitiese con la pública". "Al mismo tiempo que vamos a mejorar los recursos públicos, también vamos a mejorar la cobertura sanitaria impulsando esta colaboración, que es indispensable para prestar con eficacia los servicios que demandan los aragoneses".
Igualmente, Bancalero va a tener que confeccionar un mapa de las necesidades sanitarias de cada territorio dentro de la comunidad y elaborar, durante su primer año de legislatura, un Plan de Infraestructuras sanitarias. Así lo comprometió Azcón, quien también dijo que se remodelarían ya condicionarían los centros de salud de Aragón. Igualmente, el consejero tendrá que aplicar un gran plan de choque de cara a la reducción de las listas de espera. Se ha fijado una demora media inferior a los 45 días en cirugías cardiacas, un máximo de 60 días para intervenciones sin riesgo vital y un máximo de 90 para los 25 procedimientos más comunes.
Por otro lado, en cuanto a la Atención Primaria, el principal reto será el de ceder protagonismo a la enfermería, mejorando además sus condiciones laborales. En cuanto a salud mental, Bancalero tendrá que plantear una Estrategia Autonómica de Salud Mental y mejorar la ratio de profesionales de este ámbito. El suicidio, además, será también uno de los focos de actuación.
Finalmente, el nuevo consejero va a tener que impulsar nuevos programas de prevención del cáncer. En el caso de cáncer colorrectal se quiere alcanzar la cobertura de cribados en la población completa antes del 2024. En cuanto al cáncer de cérvix, la meta es el cribado de todas las mujeres de 25 a 65 años antes del 2028. Además, "adopto el compromiso inquebrantable de incrementar el gasto sanitario cada año por encima de la media del crecimiento presupuestario de la comunidad", concluía Azcón.