Los datos de suicidios no engañan. Durante el pasado año 2022 las cifras alcanzaron las 4.097 defunciones por esta causa, un 2,3% superior a las acontecidas el año anterior, según el informe 'Defunciones según la Causa de Muerte' del Instituto Nacional de Estadística (INE). Los datos entre los menores asustan todavía más. Si ahondamos en este dato de la edad, vemos que el número de suicidios en menores de 20 años fue de 84, frente a los 75 de 2021.
Así, la incidencia de suicidios en este grupo de edad, lamentablemente, ha aumentado. En el caso de la población infanto-juvenil las tentativas de suicidio se incrementaron en un 250% mientras que en el resto de la población "sólo" subió un 27%.
Con estos datos, son muchas las Comunidades Autónomas las que se plantean hacer frente al suicidio entre los más jovenes y buscan impulsar medidas para frentarlos con planes específicos en las aulas. Un ejemplo de ello es el programa YAM en Galicia. El último en hacerlo ha sido el Gobierno de Aragón. Los Departamentos de Educación, Ciencia y Universidades y de Sanidad del Gobierno dirigido por Jorge Azcón van a impulsar un proyecto piloto para mejorar la prevención y la respuesta ante los casos de ideación suicida en las aulas y ofrecer una atención y seguimiento más individualizados.
La colaboración entre ambas consejerías, y la especial implicación de la Dirección General de Salud Mental, persigue enriquecer el protocolo de prevención, detección e intervención que ya existe en los centros para ayudar de una manera más efectiva al alumnado que atraviesa una situación complicada y, sobre todo, garantizar su protección y cuidado.
El nuevo modelo, que involucrará directamente a las Unidades de Salud Mental Infanto Juveniles y facilitará una mayor coordinación y 'feedback', se va a testar con 20 centros educativos del Área de Salud de Huesca para su posterior evaluación e inclusión en el protocolo habilitado para todos los centros aragoneses si los resultados, como se espera, son satisfactorios.
Este miércoles, 6 de marzo, ha tenido lugar la primera reunión, en el Centro de Profesorado Ana Abarca de Bolea de la capital oscense, con los equipos directivos y los orientadores de los centros educativos para echar a andar el proyecto.
PROTOCOLO
Después de asegurar las medidas de protección necesarias en el centro escolar, se produce el intercambio de información con la Dirección General de Salud Mental, que estudia caso a caso los expedientes de los alumnos y alumnas, y determina las acciones a llevar a cabo para prevenir y evitar un intento autolítico.
Sobre esa información el equipo de Salud Mental recomienda al Equipo de Orientación Educativa en Convivencia Escolar las medidas a ejecutar y revisa, pasado un periodo de tiempo, que se hayan realizado.
La intención ahora es prolongar ese protocolo, incluyendo a las Unidades de Salud Mental Infanto Juveniles (USMIJ) --que tendrán asignadas cada centro-- y trabajando mano a mano con ellas para un seguimiento individualizado y continúo que asegure la mejora en el bienestar del alumnado.
El objetivo de sistematizar un proceso conjunto de intervención que pueda ser luego replicado en el protocolo de prevención para su extensión a toda la red de centros educativos de la Comunidad
Para ello, se ha creado una cuenta corporativa de las USMIJ y se han fijado ya tres sesiones --los próximos 15 de marzo, 12 de abril y 10 de mayo-- para trabajar la intervención concreta y específica con los casos abiertos en cada uno de los 20 centros que participarán en el pilotaje.
Todo, con el objetivo de sistematizar un proceso conjunto de intervención que pueda ser luego replicado en el protocolo de prevención para su extensión a toda la red de centros educativos de la Comunidad.
PLAN ESTRATÉGICO POR LA MEJORA DEL BIENESTAR Y LA CONVIVENCIA
Ese pilotaje para la mejora del protocolo de ideación suicida se enmarca en el plan estratégico por la mejora del bienestar del alumnado y la convivencia en los centros que ha impulsado el Departamento de Educación ante los "preocupantes" datos.
Dentro de ese plan, se están desarrollando ya jornadas dirigidas a la Red Integrada de Orientación Educativa, para presentar y analizar los datos del Equipo de Convivencia.
Por otra parte, se está dando respuesta directa a aquellos centros con alta incidencia en la apertura de protocolos de ideación suicida con la intervención de especialistas en Salud Mental para trabajar la intervención concreta y específica en cada centro analizando la situación y ofreciendo recursos, medidas e intervención individualizada para cada caso.
Así se ha hecho ya, compartiendo datos educativos y clínicos, a lo largo del mes de febrero en siete centros de la capital aragonesa y su área metropolitana.
Además, se ha diseñado un itinerario formativo, enfocado exclusivamente en la salud mental, para desarrollar la figura del Coordinador de Bienestar y Protección de los centros educativos. El 26 de enero se dio la primera jornada con el análisis de los datos de los distintos protocolos y más de 400 asistentes y la siguiente jornada, que versará sobre las patologías más frecuentes, está prevista el próximo día 15.
Todo ello confluirá en la puesta en marcha de un nuevo programa educativo de prevención el próximo curso escolar, tal y como ya anunció la consejera de Educación, Claudia Pérez Forniés, para su aplicación en infantil y primaria. Se trabajará en tutoría a edades tempranas y con un enfoque proactivo sobre las causas que se han detectado en Aragón que pueden llevar a la ideación suicida e incidir en esos factores de riesgo.
Se dividirá en dos etapas --infantil y primer ciclo de primaria; y segundo y tercer ciclo de primaria-- y llevará aparejada formación antes y durante para el coordinador de bienestar, el equipo directivo y el profesorado. Los centros que se sumen deberán incorporarlo a su proyecto educativo y a su plan de convivencia.