El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha instado este martes a la Consejería de Salud a elaborar “ya” un nuevo ‘Plan de Prevención y Atención de Agresiones para los profesionales del sistema sanitario público de Andalucía’. De este modo, el consejero Jesús Aguirre iniciará los trabajos para modificar el plan actual y se adapte a las nuevas necesidades.
El portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, ha aprovechado su intervención para cargar con los responsables del anterior plan al demostrarse que “ha fracasado”. En este sentido, ha asegurado que en los últimos años “han aumentado lamentablemente las agresiones físicas y verbales en todas las provincias andaluzas, especialmente en Málaga, Sevilla y Cádiz”.
El Gobierno andaluz asegura que tendrá "tolerancia cero" ante este tipo de agresiones; entre 2007 y 2017 se han contabilizado más de 9.000, que habrían afectado al 11 % de la plantilla del SAS
A pesar de que no ha detallado en qué se va a distinguir el nuevo método para frenar las agresiones a los sanitarios andaluces del recogido en el anterior procedimiento, Bendodo ha subrayado que el objetivo del Ejecutivo andaluz es tener “tolerancia cero ante las agresiones a profesionales del sistema sanitario público de Andalucía”.
Cabe recordar que las últimas cifras publicadas por el Servicio Andaluz de Salud (SAS), correspondientes al año 2017, muestran cómo se detectaron 241 agresiones físicas a profesionales sanitarios y 690 no físicas. Además, en los últimos diez años (de 2007 a 2017) se han contabilizado más de 9.000 agresiones, sufridas por más del 11 % de la plantilla del SAS.