Los interlocutores provinciales sanitarios de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, el teniente Fernando Rafael León y el inspector Domingo Cabrera, respectivamente, han impartido un taller en la sede del Colegio de Médicos de Sevilla para prevenir agresiones a los facultativos.
Desde que se creó está figura en las fuerzas de seguridad del estado, el Real Ilustre Colegio de Médicos de Sevilla (Ricoms) ha reforzado la colaboración con ambos interlocutores para coordinar, cooperar, desarrollar y ejecutar actuaciones encaminadas a hacer frente al aumento de las agresiones a los profesionales sanitarios.
Se pretende frenar las agresiones y garantizar una atención personalizada a los médicos
Esta colaboración pretende frenar las agresiones y garantizar una atención personalizada a los médicos que las sufran poniendo en marcha un protocolo de actuación conjunto. Entre las medidas que se han puesto en marcha está la realización de talleres dónde se les enseña a los médicos cómo actuar si se padecen una agresión o amenaza, cómo hacer frente a estas situaciones de riesgo en las consultas, o en las atenciones a domicilio.
Hasta ahora, según la Guardia Civil, estos cursos de formación se han llevado a cabo desde 2018 en centros de salud, áreas hospitalarias y colegios profesionales. Los ámbitos de actuación son la capital y los pueblos más cercanos.
Así mismo, se ha realizado un catalogo de centros médicos y se ha creado un censo de centros hospitalarios según su nivel de riesgo. Esta información se actualiza cada seis meses para poner las medidas preventivas en cada centro y adoptar acciones concretas encaminadas a prevenir las agresiones.