La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía asistió a la reunión sobre "Reducción del consumo de alcohol: política y práctica" en París. El encuentro, organizado por la asociación de ámbito europeo EuroHealthNet y Salud Pública de Francia, sirvió para discutir los avances, de cada país y región, de las áreas de acción prioritarias fijadas por la Unión Europea.
Las áreas de acción fijadas por la Unión Europea se centran en la fijación de precios del alcohol, facilidades de compra y consumo con especial preocupación por los jóvenes, análisis de las campañas de marketing de bebidas alcohólicas y debate sobre campañas de marketing social para prevención de los efectos del alcohol.
Además, defienden el derecho a información científica y fiable relativa al contenido de las bebidas alcohólicas y a los riesgos del consumo del alcohol. La manera más eficaz de incorporar esta información al etiquetado de los productos o la respuesta de los sistemas de salud con un abordaje conjunto de los abusos del alcohol con otros problemas de salud asociados.
En el encuentro se abordó también el impacto en las familias y las necesidades de apoyo desde otros dispositivos de protección social para facilitar la recuperación, así como la organización de la prevención del consumo de alcohol, especialmente entre los más jóvenes y en los grupos de riesgo, combinando las intervenciones comunitarias con las que se desarrollen en el ámbito educativo.
El alcohol es un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos y acarrea graves consecuencias individuales y familiares que suponen pérdidas sociales y sobrecarga de los sistemas de salud pública
Aunque la situación en cuanto a niveles de consumo, problemas asociados y estrategias de intervención varía ampliamente dentro de la Unión Europea, se extiende la concienciación por las evitables consecuencias sociales y de salud, asociadas al consumo del alcohol, al tiempo que se van alcanzando consensos clave en las estrategias más efectivas para abordar este problema y reducir su consumo per cápita en la medida fijada por la Unión.
Del mismo modo, existe consenso sobre la carga sanitaria y social asociada derivada del consumo de alcohol. La preocupación se extiende más allá de los efectos inmediatos de su consumo al estar vinculado el consumo de alcohol a numerosas enfermedades como cánceres del sistema digestivo, debilitamiento de sistema inmunitario, problemas neurológicos, circulatorios, etc. siendo el alcohol un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos. Además de acarrear graves consecuencias individuales y familiares que suponen importantes pérdidas sociales y sobrecarga de los sistemas de salud pública.
La Organización Mundial de la Salud, aprobó en mayo de 2022 el Plan de Acción Global sobre el Alcohol 2022-2030, para reducir el consumo perjudicial del alcohol y establecerlo como una prioridad en salud pública. El Marco Europeo de Acción Sobre el Alcohol 2022–2025 persigue una reducción del 10% en el consumo de alcohol per cápita respecto a los niveles de 2010.