El Colegio de Médicos de Sevilla (Ricoms) ha celebrado la 'I Jornada Antiagresiones al Personal Sanitario' en su sede colegial con el objeto de analizar y compartir reflexiones e iniciativas para afrontar la "creciente y preocupante" oleada de agresiones a profesionales sanitarios. No en vano, las agresiones registradas han aumentado un 5% en 2018 respecto al año anterior, aunque se estima que pueden ser muchas más dado que, en la mayoría de ocasiones, la víctima no denuncia por miedo a posibles represalias.
En las dos mesas redondas que se celebraron, participaron representantes de la Junta de Andalucía, el Observatorio de Agresiones de la Organización Médica Colegial (OMC), la Fiscalía General, la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, los servicios jurídicos de la corporación médica sevillana, los colegios profesionales de Enfermería y Farmacia, interlocutores policiales sanitarios de la Guardia Civil y la Policía.
Durante el desarrollo de los foros de debate, se analizaron las causas y consecuencias de las agresiones, así como se intercambiaron propuestas para erradicar esta situación. En este sentido, algunas de las iniciativas destacadas fueron el endurecimiento de las penas a los agresores, el establecimiento en toda España de la consideración del profesional sanitario como autoridad (situación sólo vigente en la actualidad en algunas comunidades autónomas), la concienciación entre los profesionales sanitarios de la necesidad de denunciar, o el fomento de una mayor sensibilización social.
"Las agresiones son más habituales donde hay menos nivel educativo y mayores recortes en recursos sanitarios se han hecho"
El jefe de los servicios jurídicos del Ricoms, Santiago Campo, se ha lamentado de que "el cambio legislativo de 2015 no ha servido para nada. Se despenalizaron los insultos, vejaciones, empujones y violencia de 'baja intensidad'. Muchas veces nos vemos sin recursos jurídicos para actuar contra las agresiones".
En cuanto a la intervención de la doctora Ana María Gómez Martín, vocal representante de Atención Primaria del Ricoms, según un estudio reciente, "las agresiones son más habituales donde hay menos nivel educativo y mayores recortes en recursos sanitarios se han hecho".
Seguidamente, los representantes de las fuerzas de seguridad incidieron en la utilidad tanto del teléfono 062 como de la aplicación electrónica Alertcops, que permite la rápida denuncia de robos y agresiones, y que próximamente incluirá un servicio específico dedicado al profesional sanitario. "La población debe conocer que agredir a un profesional sanitario es un delito hacia una autoridad", señalaron tanto el inspector Domingo Cabrera, del Cuerpo Nacional de Policía, como el teniente Fernando León, de la Guardia Civil.
"La población debe conocer que agredir a un profesional sanitario es un delito hacia una autoridad"
En cuanto a los representantes de los colegios de Enfermería y Farmacéuticos, Alonso Yáñez y Juan Pedro Vaquero, respectivamente, ambos coincidieron en que, "aunque la primera línea frente al agresor suelen ser médicos y enfermeros, también se registran casos de agresiones dentro de las farmacias".
Por último, durante el periodo de conclusiones de la jornada, el presidente del Colegio de Médicos, Alfonso Carmona, destacó la importancia de encontrar "soluciones inmediatas" tanto para "los profesionales que desarrollan su actividad en la sanidad pública como los que también lo hacen en la privada".
"El objetivo de este foro es analizar con luz y taquígrafos, esta lacra de agresiones que sufre nuestra profesión en España, con especial incidencia en Andalucía, buscando las posibles estrategias y soluciones que todas las partes implicadas. Como Colegio de Médicos estamos en el deber de luchar por la erradicación total de cualquier tipo de agresión, física o verbal, y en ello trabajamos sin descanso", concluyó el doctor Carmona.