Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla vivirán este domingo, al igual que otras doce CC.AA., una jornada electoral que marcará la dirección política de estos dos municipio españoles del norte de África. Sin embargo, la peculiaridad de estos enclaves radica en el hecho de que su gestión sanitaria no dependerá de los cargos electos tras los comicios, sino que seguirá corriendo a cargo del Ministerio de Sanidad a través del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa); un departamento que en la actualidad dirige Belén Hernando Galán.
Si bien las competencias de la sanidad ceutí y melillense están delegadas en el Gobierno central –el Ministerio de Sanidad-, sí es cierto que sus máximos representantes políticos serán los responsables últimos de trasladar las actuaciones y retos que consideren necesarios para abordar, en las mejores condiciones posibles, la salud futura de sus ciudadanos. En base a esto, las elecciones del 28M presentan en ambas ciudades dos diferentes panoramas políticos y posibles desenlaces electorales, pero, a la vez, también similares desafíos en el marco de sus singulares sistemas sanitarios.
TODO POR DECIDIR
Los ciudadanos ceutíes serán los encargados de discernir quién será su próximo mandatario municipal en un escenario que se presenta completamente abierto, según se desprende de las diferentes encuestas. El actual presidente y líder del PP ceutí, Juan Jesús Vivas, persigue revalidar su séptimo mandato y ya ha anunciado que no se plantea un pacto de gobierno con Vox (Juan Sergio Redondo), lo que podría dificultarle la mayoría suficiente necesaria para lograrlo. En el otro lado del tablero se presenta una situación similar, puesto que el candidato del PSOE, Juan Gutiérrez, podría necesitar la suma de apoyos por parte de Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (Fatima Hamed) y Ceuta Ya! (Mohamed Mustafa).
Por otro lado, la dirección en el gobierno de Melilla presenta un panorama muy equilibrado, similar al ceutí. En este caso las elecciones del 28M marcarán la resolución de un duelo que las encuestas prevén igualado
Por otro lado, la dirección en el gobierno de Melilla presenta un panorama muy equilibrado, similar al ceutí. En este caso las elecciones del 28M marcarán la resolución de un duelo que las encuestas prevén igualado entre el PP de Juan José Imbroda, quien necesitaría el apoyo de Vox (José Miguel Tasende); y, por otro lado, la candidatura de Dunia Almansouri (Coalición por Melilla), quien podría gobernar con la colaboración del PSOE (Gloria Rojas). Además, por el lado de Podemos encontramos a Gema Aguilar. De esta terna de candidatos saldrá el responsable de la gobernanza en Melilla para los próximos cuatro años.
DÉFICIT DE PROFESIONALES
El reto de la falta de sanitarios que salpica el mapa español no es una excepción en las ciudades autónomas. De hecho, se trata de un desafío especialmente singular en estos territorios, dada su situación de aislamiento geográfico con respecto a la península. Según apunta el propio Ministerio de Sanidad, el objetivo pasa por enfrentar la significativa falta de profesionales en la sanidad pública de ambas localidades. Sin ir más lejos, los datos del departamento que dirige José Miñones reflejan la principal carencia en el servicio público de estas localidades: la falta de profesionales.
Una necesidad de más recursos humanos que a corto y medio plazo pasará por que los responsables políticos focalicen sus esfuerzos en reforzar el personal médico
De esta manera, la nueva legislatura deberá enfocarse en aumentar la actual tasa de médicos por cada 100.000 habitantes en Ceuta y Melilla, que se estima en 0,64 y 0,65 facultativos, respectivamente. Situación similar a la que se tendrá que abordar en las plantillas de enfermeras, con 0,55 por cada 100.000 habitantes; y en las de personal médico de atención especializada, con1,54 en Melilla y 1,67 en Ceuta por cada 1.000 habitantes. Una necesidad de más recursos humanos que a corto y medio plazo pasará por que los responsables políticos focalicen sus esfuerzos en reforzar el personal médico y de profesionales sanitarios en general, así como lograr estabilizarlos.
ÁREAS DE DIFÍCIL COBERTURA
El desafío de los servicios de salud de estas dos localidades al otro lado del estrecho se ha de encaminar a dar respuesta a las diferentes reivindicaciones que, como en muchas otras regiones españolas, sostienen desde hace tiempo sus colegiados. El propio presidente del Sindicato Médico de Melilla (SMM), Leopoldo Rodríguez, confesó recientemente a ConSalud.es que Ceuta y Melilla continúan siendo tras más de 20 años “dos islas sanitarias” con respecto a la península. Una situación de peculiar ‘insularidad’ que desde los partidos políticos regionales deberán instar al Ministerio de Sanidad –Ingesa- a corregir durante los próximos años. Principalmente, en la línea de equiparar las condiciones de los profesionales sanitarios a las de sus colegas de territorios vecinos.
Esta distinción permitirá trabajar en la línea de incentivar la labor de los sanitarios en estas plazas de trabajo; fidelizando al personal sanitario existente y captando a nuevos profesionales para ambas ciudades
En esta dirección, el pasado 21 de febrero el Gobierno de España recogió en el BOE el reconocimiento de ambas ciudades como “áreas sanitarias de difícil cobertura”. Esta distinción permitirá trabajar en la línea de incentivar la labor de los sanitarios en estas plazas de trabajo; fidelizando al personal sanitario existente y captando a nuevos profesionales para ambas ciudades. Unas pautas que se dieron a conocer en el marco del último Consejo Interterritorial del SNS presidido por Carolina Darias el pasado 17 de marzo, previo a su relevo en el cargo por el actual ministro de Sanidad, José Miñones.
El propio responsable de la cartera de Sanidad ha mostrado recientemente su predisposición para abordar los diferentes retos sanitarios que el futuro deja atisbar frente a las costas de Ceuta y Melilla. Como punto de partida, Miñones quiso destacar que tanto una como la otra “son las ciudades con menor tiempo de espera en Atención Primaria de todo el país”. Del mismo modo, de cara al nuevo ciclo electoral que comenzará a partir del 28M, anuncia "ambiciosas inversiones y mejoras para la reforma de la atención" en ambos municipios, así como la inminente puesta en marcha del Hospital Universitario de Melilla.