El Colegio Oficial de Veterinarios de Almería, en colaboración con la Delegación de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía en Almería, ha lanzado la campaña 'Por un mundo sin leishmaniosis, One Health', impulsada por el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales Veterinarios (CACOV). “Sin duda, el mejor método es el diagnóstico precoz, la detección temprana. Es importante concienciar a los propietarios de animales, y que los centros veterinarios aporten datos de los casos”, ha destacado Yasmina Domínguez, presidenta del Colegio Oficial de Veterinarios de Almería, tras el aumento de casos en la provincia.
Una buena salud, requiere la colaboración y la unión de esfuerzos en todos los ámbitos
La región mediterránea, debido a sus condiciones climáticas, es un área endémica tanto para la leishmaniosis canina como para la humana. En este contexto, la presidenta ha enfatizado que la salud humana, animal y medioambiental están intrínsecamente interconectadas, subrayando la necesidad de un enfoque integral para preservarlas. Asimismo, Domínguez ha destacado que, una buena salud, requiere la colaboración y la unión de esfuerzos en todos los ámbitos.
Por otro lado, Juan de la Cruz Belmonte, delegado territorial de Salud y Consumo, ha destacado que las personas más afectadas por la leishmaniosis son niños y adultos con sistemas inmunológicos comprometidos. Asimismo, ha recordado la importancia de considerar esta enfermedad en el cuidado de las mascotas, especialmente durante la temporada de mayor actividad del vector, de junio a octubre, protegiéndolas con repelentes como collares y pipetas.
En esta misma línea, durante la sesión formativa inicial, los expertos han hecho hincapié en la importancia de diagnosticar precozmente la leishmaniosis canina y en familiarizar a los veterinarios con las herramientas diagnósticas disponibles para abordar las situaciones clínicas que encuentran en su práctica diaria.
Por otro lado han subrayado que este enfoque no solo es clave para el manejo individual de la enfermedad, sino que también contribuye al control general de esta zoonosis y a la reducción del riesgo para la salud pública. Además del diagnóstico han resaltado la importancia de implementar medidas preventivas, como el uso de insecticidas y la vacunación anual, para evitar que los perros se enfermen.
¿CÓMO REDUCIR EL RIESGO DE CONTAGIO?
Es factible ofrecer pautas ambientales para mitigar el riesgo de contagio, como evitar áreas con alta incidencia, lugares propensos a la puesta de huevos (como zonas con gran cantidad de materia orgánica) y tener precaución en zonas al aire libre en momentos de mayor actividad del insecto. Además, la identificación de animales enfermos, mediante un diagnóstico preciso, posibilita la aplicación de tratamientos que alivian los síntomas y disminuyen la probabilidad de que el animal transmita esta enfermedad parasitaria a otros mamíferos.
Por último, la vacunación de perros sanos es una herramienta fundamental, eficaz y segura, no solo para proteger al propio animal, sino también para contribuir al control global de la enfermedad en países donde la leishmaniosis es endémica.