El Bloque Nacionalista Galego (BNG) ha presentado este martes en el Congreso de los Diputados una Proposición no de Ley (PNL) instando al Gobierno a revisar el Real Decreto 666/2023, que regula la distribución, prescripción y uso de medicamentos veterinarios. La iniciativa, impulsada por el diputado Néstor Rego Candamil, busca atender las demandas del sector veterinario, que ha expresado su preocupación por las restricciones impuestas y el aumento de la burocracia que supone esta normativa.
Según argumenta el Grupo Parlamentario Mixto, el decreto ha supuesto un incremento desmesurado de la carga administrativa para los profesionales del sector. "Las clínicas veterinarias no tienen la estructura necesaria para asumir este volumen de trabajo adicional, lo que afecta directamente a la atención de los animales", han señalado desde la formación. Además, advierten de que las sanciones contempladas en caso de incumplimiento son "desproporcionadas y excesivas".
Una de las principales críticas al decreto es la exigencia de pruebas de laboratorio previas a la prescripción de determinados antibióticos, lo que, según los veterinarios, retrasa innecesariamente los tratamientos. "Esta medida impone limitaciones que van más allá de lo que exige la normativa europea y restringe el criterio clínico de los veterinarios", ha denunciado el BNG. En este sentido, recuerdan que el Reglamento Europeo 2019/6 solo requiere una evaluación del estado de salud del animal antes de recetar medicamentos.
"Los veterinarios deben ceñirse estrictamente a las fichas técnicas de los fármacos sin poder adaptar la dosis a cada caso particular, lo que genera problemas de abastecimiento y encarece los tratamientos"
El grupo parlamentario también ha advertido sobre la falta de flexibilidad que impone el decreto en la elección de medicamentos. "Los veterinarios deben ceñirse estrictamente a las fichas técnicas de los fármacos sin poder adaptar la dosis a cada caso particular, lo que genera problemas de abastecimiento y encarece los tratamientos", han señalado. Asimismo, critican que la normativa dificulta la administración de medicamentos desde los botiquines de las clínicas, salvo en casos de desabastecimiento en farmacias.
Para abordar estos problemas, la PNL presentada por el BNG solicita, en primer lugar, una moratoria en la aplicación del decreto mientras se establecen canales de diálogo con el sector veterinario. Además, propone modificar la normativa para que el juicio clínico del veterinario prevalezca sobre las fichas técnicas de los medicamentos y que las pruebas de laboratorio solo se realicen cuando el profesional lo considere necesario.
Otras medidas incluidas en la proposición son la posibilidad de que los veterinarios elijan libremente el antimicrobiano más adecuado sin necesidad de escalar categorías y la autorización para que las farmacias de las clínicas veterinarias puedan dispensar los medicamentos necesarios. "El objetivo es garantizar tratamientos más ágiles y evitar el almacenamiento innecesario de fármacos en los hogares", han explicado desde el BNG.
La propuesta será debatida en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación del Congreso, donde el grupo parlamentario espera recabar apoyos para su aprobación. "Es fundamental que se escuche a los profesionales y se adopten soluciones que no perjudiquen ni a los veterinarios ni a los animales que atienden", ha concluido Néstor Rego Candamil.