Los veterinarios llevan más de una década pidiendo que se revise la bajada del IVA veterinario. Este impuesto afecta directamente a la salud animal y condiciona a los tutores de mascota a elegir o no determinados tratamientos que son de vital importancia no solo para los animales de compañía, sino también para la salud de los humanos. Y es que, si tenemos en cuenta que algunas enfermedades potencialmente mortales son compartidas entre animales y personas, reducir la protección frente a muchas de ellas podría suponer un riesgo de salud pública.
Así lo expresaba el presidente de la Organización Colegial Veterinaria, Luis Alberto Calvo, en una entrevista para AnimalCare. “Llevamos 12 años o más en esta lucha. Una lucha absoluta y continua. No vamos a parar”, aseguraba. De hecho, en los últimos días hemos visto cómo los veterinarios han vuelto a exigir esa revisión del IVA veterinario. Concretamente, en la última manifestación celebrada en Barcelona en la que no solo pedían la retirada de la nueva normativa que pone en riesgo el criterio clínico de los veterinarios.
“Llevamos 12 años o más en esta lucha. Una lucha absoluta y continua. No vamos a parar”
“Los tutores de animales están pagando un 21% de IVA por operarse de una cadera o del corazón”, afirma Calvo a este medio. “Queremos mucho a los animales, pero no les dotamos de seguridad sanitaria”, añade. Además, si comparamos con los impuestos que tienen el resto de profesiones sanitarias desarrolladas en el ámbito privado, vemos que todas ellas tienen un IVA reducido a cero.
Se trata, por tanto, “de un gravamen muy peligroso”, indica el presidente de los veterinarios de España. Más si tenemos en cuenta que un perro puede transmitir cualquier enfermedad a un humano. Calvo pone de ejemplo la rabia: “Si un perro no está vacunado de rabia y muerde a una persona, esa persona muere”. “Hablamos de que una de cada una personas afectadas por rabia muere”, insiste.
En este sentido, Calvo también destaca que el 90% de los casos de rabia provienen de los perros. “No existe ninguna otra forma de proteger a los seres humanos de la rabia que no sea a través de la vacunación de los animales”, subraya. “No podemos hablar de los derechos de los animales cuando les estamos quitando el derecho a tener una salud en condiciones”.
EL IVA VETERINARIO EN EL PANORAMA POLÍTICO
El IVA veterinario también ha sido protagonista en los últimos meses dentro del panorama político. La última vez en el Congreso de los Diputados y, más concretamente, en una reunión entre PACMA y Sumar donde ambos partidos debatieron sobre esta cuestión que afecta directamente a veterinarios y tutores de animales de compañía.
Es cierto que la reducción que piden desde el partido animalista es del 21 al 4%. Sin embargo, PACMA aseguraba en una nota de prensa emitida el pasado 31 de enero que se trató de “una reunión positiva” en la que el portavoz de Economía y Hacienda de Sumar, Carlos Martín Urriza, se mostró dispuesto a negociar con sus socios de Gobierno.
No obstante, el Ministerio de Hacienda se ha opuesto a esta decisión. De hecho, el departamento ha afirmado que esta reducción supondría una pérdida de ingresos fiscales, por lo que se oponen a establecer esta bajada del gravamen. Sin embargo, los animalistas han pedido que se ponga en marcha una reforma fiscal debido a la urgencia del asunto.
Mientras tanto, más allá del debate político, los veterinarios mantienen su lucha para acabar con este impuesto que supone un riesgo para la salud de los animales y de toda la población. De hecho, continúan las protestas que mantienen en el centro del debate la oposición a la nueva normativa del medicamento y a la que acompañan las repetidas peticiones de los clínicos de pequeños animales por acabar con el IVA al 21%.