La peste porcina africana continúa su expansión a nivel mundial. Esta enfermedad provoca hasta un 100% de muertes en las granjas afectadas y, actualmente, no tiene cura. Además, en el último año, los casos se han disparado sin control y los contagios han alcanzado regiones que hasta la fecha no estaban afectadas por la enfermedad.
La PPA afecta tanto a cerdos domésticos como a jabalíes, un virus que puede sobrevivir largos periodos en el ambiente y muchos años en muestras infectadas. El movimiento de los animales infectados es la fuente principal de propagación, aunque también se produce por productos contaminados o la eliminación ilegal de cadáveres sin correctas medidas de seguridad.
“Un brote de la enfermedad puede tener efectos devastadores tanto en cerdos de granja como en la economía en general”, apunta en un informe sobre la enfermedad el Servicio de Investigación del Parlamento Europeo. En este sentido, y debido a sus graves efectos, Europa ha evaluado la situación y la expansión de la enfermedad para tomar medidas que beneficien al sector ganadero.
Los cerdos domésticos han sido los menos afectados, con 537 brotes de peste porcina africana, frente a los 7.442 brotes en jabalíes en 15 países europeos
El último informe del Sistema de Información sobre Enfermedades Animales de la UE (ADIS) presentado por la Comisión Europea con datos hasta finales de 2022 alerta del alcance de la enfermedad en países europeos. Los cerdos domésticos han sido los menos afectados, con 537 brotes de peste porcina africana, frente a los 7.442 brotes en jabalíes en 15 países europeos.
En 2023, ADIS ha contabilizado los brotes hasta finales de julio, tiempo en el que ha registrado 902 brotes en poblaciones de cerdos domésticos en 16 países europeos y 5.445 en porcino silvestre en 19 países. Por este motivo, las autoridades recuerdan la importancia de comunicar los casos que se detecten para tomar medidas frente al avance de la PPA.
La legislación europea establece medidas para la prevención y el control de la enfermedad en el Reglamento 2020/687, así como el plan de actuación ante la confirmación de un brote. Sin embargo, la entidad europea continúa en busca de una vacuna efectiva para lidiar contra la PPA, y evitar las pérdidas animales y económicas que genera.
LA AUSENCIA DE VACUNAS, BARRERA PRINCIPAL DE LA PPA
La UE continúa buscando alternativas para paliar los efectos de esta enfermedad. El informe presentado por la entidad explica que, en 2022, el veterinario jefe de la Junta Nacional Porcina de EE.UU., Dustin Oedekoven, adelantó que “a pesar de los avances en la investigación, el virus de la peste porcina africana es un virus de gran tamaño que codifica varias proteínas y hacer que el desarrollo de la vacuna sea una tarea muy difícil”.
El laboratorio de referencia de la UE contra la peste porcina africana garantiza la eficacia de la vacuna estudiada para luchar contra la enfermedad y confía en su “potencial para ser un candidato a la comercialización”, aunque es necesario abordar otras cuestiones para asegurar la efectividad del tratamiento.
El Parlamento y el Consejo se han mostrado a favor del desarrollo de la vacuna, y han desarrollado diversas iniciativas para el control de la enfermedad
Sanidad Animal Europa defiende la dificultad de desarrollar una vacuna eficaz contra la PPA. En este sentido, el grupo exige un aumento de la financiación disponible para la investigación y un trabajo coordinado entre los responsables políticos. Además, Sanidad Animal afirmó que las vacunas no deben funcionar como una barrera comercial.
Por el momento, el Parlamento y el Consejo se han mostrado a favor del desarrollo de la vacuna, y han desarrollado diversas iniciativas para el control de la enfermedad. En la legislatura actual se han presentado 50 preguntas parlamentarias, entre ellas sobre temas como la financiación adicional, la reasignación de fondos y la estrategia de erradicación. Mientras acercan posturas, los Estados se mantienen expectantes ante el aumento sin precedentes de los brotes de peste porcina africana.