Un grupo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha estudiado minuciosamente el impacto de las carreteras en las relaciones entre las especies vivas, ofreciendo valiosas perspectivas a través de la revisión de 2.144 artículos científicos. Este estudio revela que las carreteras desencadenan efectos adversos en la vida silvestre, contribuyendo a la pérdida y fragmentación del hábitat, la mortalidad de la fauna debido a accidentes viales, la contaminación del entorno y un incremento en la actividad humana en las áreas circundantes.
“Aunque se trata de un tema poco estudiado, es de vital importancia para la conservación de los ecosistemas y los procesos que ocurren en él”, destaca Pablo Quiles, investigador del Departamento de Biodiversidad, Ecología y Evolución de la UCM.
La investigación, difundida en Biological Reviews, analizó seis interacciones interespecíficas clave: depredación, competencia, parasitismo, mutualismo, comensalismo y amensalismo. Los resultados indicaron que aproximadamente la mitad de los estudios abordaron la depredación, un cuarto la competencia, mientras que el mutualismo representó el 17 % y el parasitismo el 9%. Curiosamente, no se encontraron artículos relacionados con comensalismo y amensalismo.
El análisis resalta cómo las carreteras alteran las relaciones depredador-presa, afectando adversamente a las poblaciones de presas
El sesgo geográfico fue evidente, ya que la mayoría de los estudios se llevaron a cabo en mamíferos de países de altos ingresos, especialmente en Estados Unidos (34 %) y Canadá (18%). El análisis resalta cómo las carreteras alteran las relaciones depredador-presa, afectando adversamente a las poblaciones de presas. Además, las áreas circundantes a menudo favorecen a especies más competitivas, como las invasoras, y degradan interacciones beneficiosas como la dispersión de semillas y la polinización.
En base a los hallazgos, los investigadores proponen medidas para mitigar estos impactos negativos. Sugieren la reducción de la velocidad del tráfico en puntos específicos para mejorar la polinización y minimizar las interrupciones en la relación depredador-presa. La disminución de la velocidad del tráfico también se vincula con la alta tasa de mortalidad de insectos polinizadores y el estado de alerta constante de las especies presa debido al tránsito vehicular.
La sugerencia de utilizar alternativas a la sal común busca prevenir su impacto en hábitats de agua dulce
Además, los investigadores resaltan la importancia de mantener márgenes de carreteras lo más anchos y heterogéneos posible, abogando por la combinación de diferentes regímenes de siega y la reducción del uso de sales para el deshielo. La sugerencia de utilizar alternativas a la sal común busca prevenir su impacto en hábitats de agua dulce, donde podría alterar el pH natural y afectar adversamente a las especies residentes.
Otras recomendaciones incluyen evitar la implementación aislada de pasos de fauna y realizar la eliminación periódica de cadáveres en la carretera para reducir su atractivo para la vida silvestre. Estas medidas buscan abordar de manera integral los impactos de las carreteras en los ecosistemas y fomentar prácticas más sostenibles y respetuosas con la biodiversidad.
En particular son de vital importancia estudios que describan de forma cuantitativa estas interacciones entre especies, antes y después de que se construyan las carreteras
“El siguiente paso en el estudio es, por parte de la comunidad científica, seguir investigando estas alteraciones ecológicas provocadas por las carreteras. En particular son de vital importancia estudios que describan de forma cuantitativa (y con medidas repetibles) estas interacciones entre especies, antes y después de que se construyan las carreteras”, concluye Quiles.