SEO/BirdLife ha elaborado un mapa que revelan las áreas consideradas "menos favorables" para la implementación de energías renovables eólica y fotovoltaica en España, basándose en el posible impacto que estas infraestructuras podrían tener en las aves y en los espacios protegidos. La organización ha expresado su preocupación por el "desordenado despliegue de las energías renovables" en los últimos años, destacando la importancia de un desarrollo responsable de estas tecnologías en medio de una emergencia climática.
Estos mapas identifican las zonas menos idóneas para el desarrollo de energía fotovoltaica y eólica, con la esperanza de frenar la proliferación de instalaciones en áreas sensibles. SEO/BirdLife ha presentado objeciones y recursos contra más de quinientos proyectos entre 2019 y 2023, con un enfoque significativo en proyectos fotovoltaicos (62%), seguidos por proyectos eólicos (35%), proyectos eólicos marinos (2%), y otros proyectos híbridos y solares flotantes (1%).
La organización ha denunciado la instalación de proyectos de energías renovables en áreas de alto valor ecológico, como áreas importantes para las aves, límites de espacios protegidos de la Red Natura 2000
La falta de una planificación territorial vinculante y adecuada ha motivado la creación de estos mapas, según explicó SEO/BirdLife. La organización ha denunciado la instalación de proyectos de energías renovables en áreas de alto valor ecológico, como áreas importantes para las aves, límites de espacios protegidos de la Red Natura 2000, y zonas prioritarias para especies amenazadas, lo que ha provocado la pérdida y degradación de hábitats.
"Estos mapas son una herramienta más para que la Administración pueda mejorar su planificación y las empresas asuman la responsabilidad en la ubicación de sus proyectos", ha explicado Ana Carricondo, coordinadora de Conservación de la organización. "Aunque se ha avanzado en la manera en que se construyen y gestionan las instalaciones fotovoltaicas o los sistemas de detección y parada de los aerogeneradores, ninguna mejora en estos ámbitos reducirá significativamente el impacto sobre la biodiversidad si se ubican en los lugares inadecuados", ha advertido.
Los mapas de SEO/BirdLife se basan en una amplia recopilación de información a lo largo de décadas, clasificando las zonas según la sensibilidad de las especies de aves y el mantenimiento de los territorios. Para su creación, los expertos han tenido en cuenta las especies afectadas por las energías renovables y su amenaza, así como la presencia de figuras de protección ambiental como espacios naturales protegidos y la Red Natura 2000.
La organización ha creado un mapa específico para instalaciones eólicas y otro para fotovoltaicas, considerando las especies de aves más afectadas por cada tipo de tecnología. En el caso de las instalaciones eólicas, se incluyen especies susceptibles de colisionar con las palas de los aerogeneradores y aquellas sensibles a la alteración de su hábitat. Para las energías fotovoltaicas, se destacan las aves agroesteparias y las rapaces, afectadas por los cambios en el paisaje y la construcción de infraestructuras en sus áreas de alimentación y campeo.
SEO/BirdLife ha compartido estos mapas con empresas del sector energético, administraciones públicas, organizaciones conservacionistas y ciudadanos interesados, con el objetivo de guiar la ubicación de instalaciones renovables y evitar conflictos con la naturaleza y las comunidades locales. Además, la organización ha advertido de que los proyectos de energías renovables que se desarrollen en zonas de baja sensibilidad “deberán someterse igualmente a un proceso de Evaluación de Impacto Ambiental para tener las máximas garantías”.