Las gaviotas podrían verse afectadas por el contacto con el plástico almacenado en los vertederos

Una investigación liderada por la Estación Biológica de Doñana del CSIC confirma el riesgo del contacto con los plásticos a la salud de las gaviotas

Gaviotas sombrías. (Foto: Víctor Martín Vélez/CSIC)
Gaviotas sombrías. (Foto: Víctor Martín Vélez/CSIC)
AnimalCare
16 febrero 2024 | 10:00 h
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No solo la expansión de los plásticos está afectando a la salud de las aves acuáticas. También los residuos de los vertederos pueden dañar su salud. Estas especies, especialmente las gaviotas, entran en contacto con estos plásticos en los vertederos para después depositarlos en los humedales, un proceso que puede dar lugar a la ingestión de plásticos y provocar la muerte de estos animales.

Un equipo científico internacional, encabezado por la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha llevado a cabo una investigación exhaustiva sobre el impacto de las gaviotas, en particular las gaviotas sombrías (Larus fuscus), en la dispersión de plásticos en masas de agua naturales, especialmente durante el invierno en la región de Andalucía. Este estudio, integrado en el marco del proyecto de investigación GuanoPlastic y respaldado por la Junta de Andalucía, ha estudiado cómo las aves acuáticas, como las gaviotas, desempeñan un papel crucial en el movimiento de contaminantes y cómo afectan a su salud.

Se ha observado que las aves acuáticas, al alimentarse en vertederos abiertos, ingerir plásticos y otros desechos, incluyendo vidrio y textiles, que posteriormente son expulsados en los lugares donde descansan, a menudo en forma de gránulos regurgitados. Si bien la ingestión de plásticos presenta riesgos para la salud de estas aves y puede resultar mortal, el fenómeno de biovectorización, es decir, el transporte de estos contaminantes por animales, también puede generar problemas ecológicos más amplios debido a la bioacumulación de plásticos en los ecosistemas naturales. Este hallazgo resalta la importancia de abordar la contribución de las aves acuáticas a la dispersión y acumulación de plásticos, destacando la necesidad de estrategias de gestión ambiental para mitigar estos impactos en la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos.

"En los últimos años, la acumulación de plástico en humedales ha empezado a recibir más atención"

“Hasta ahora, los estudios relacionados con el plástico en las aves se han centrado en los entornos marinos y se ha subestimado el papel de las aves acuáticas en lagos y otras masas de agua continentales. En los últimos años, la acumulación de plástico en humedales ha empezado a recibir más atención”, explica Víctor Martín Vélez, investigador del CSIC que en el momento del estudio trabajaba en la EBD-CSIC y actualmente es científico en el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC).

Durante un período de siete años, se llevó a cabo una investigación exhaustiva que implicó el rastreo de 45 gaviotas a través de dispositivos GPS instalados en sus lugares de cría en el Reino Unido, los Países Bajos y Bélgica. La recolección de datos incluyó la combinación de patrones de movimiento registrados con estos dispositivos con recuentos de aves en la laguna de Fuente de Piedra, ubicada en Málaga. Además, se llevaron a cabo estudios dietéticos que analizaron el contenido de las egagrópilas regurgitadas, permitiendo estimar la cantidad y los tipos de plástico depositados por grupos de hasta veinte mil gaviotas individuales que invernaban en el lago. Esta metodología integrada proporcionó una visión detallada de la contribución de las gaviotas sombrías a la dispersión de plásticos en la región.

Las gaviotas sombrías, siendo una especie particularmente abundante en la reserva natural de Fuente de Piedra, han experimentado un aumento significativo en su número. Este aumento se vincula estrechamente con la presencia de vertederos en varias partes de Andalucía, donde estas aves se alimentan habitualmente. En estos lugares, las gaviotas ingieren plásticos y otros residuos.

Los datos recopilados mediante GPS revelan la capacidad de vuelo de estas aves, alcanzando distancias de hasta 80 kilómetros, extendiéndose hasta Córdoba, la distancia que separa la reserva natural de algunos de los vertederos visitados. Estos resultados resaltan la conexión crítica entre la actividad humana, la proliferación de vertederos y la dispersión de plásticos por parte de las gaviotas sombrías en los ecosistemas acuáticos.

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