La comunidad ha detectado 13 casos sospechosos de enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) en vacas de carne. El contagio se ha extendido a once explotaciones ganaderas en diferentes municipios de la comunidad autónoma y se prevén restricciones en el movimiento del ganado.
De los casos sospechosos, doce han dado positivo en análisis realizados en laboratorios de Cantabria, aunque uno de ellos aún está pendiente de confirmación. Las pruebas se han enviado al Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) para tener un segundo resultado que dé la confirmación definitiva.
Finalmente, si se confirman los casos de EHE, Cantabria adoptará las medidas pertinentes para el control del brote, como las restricciones en los movimientos del ganado. Así lo confirmó el pasado 4 de septiembre el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, Pablo Palencia, tras la reunión con el resto del sector agrario.
Entre las restricciones a nivel europeo, se establecerán limitaciones de movimiento de 150 kilómetros, mientras que a nivel nacional serán "más laxas"
En la reunión de consejeros también han participado otros representantes del sector ganadero, como las organizaciones de la Mesa Agraria y otras de productores y profesionales, como el Colegio Oficial Veterinario de Cantabria.
Entre las limitaciones de movimiento, según ha explicado Palencia, se darán en dos niveles. Por un lado, a nivel de la Unión Europea, con restricciones de 150 kilómetros del foco, mientras que a nivel nacional serán "más laxas" y se reducirán a los 50 kilómetros.
RESTRICCIONES EN LOS MOVIMIENTOS
Para el movimiento del ganado será necesario un certificado de desinfección del transporte y de los animales, además de no tener síntomas compatibles con esta enfermedad.
Según ha detallado, la mayoría de casos se han detectado en el municipio de Penagos, que contabiliza siete contagios. El resto se reparten por Liérnages (2), Piélagos (1), Ribamontán al Monte (1), Castañeda (1) y Medio Cudeyo (1 que se da por confirmado, aunque falta el resultado positivo). La extensión de los contagios por estos municipios obligará a restringir el movimiento a prácticamente toda Cantabria.
Palencia ha explicado que, su objetivo, ha sido informar al sector "con la mayor rapidez posible" de los casos y las medidas restrictivas a las que obliga el Protocolo Zoosanitario, como es la citada limitación de los movimientos de ganado.
Se ha explicado en qué consiste esta enfermedad que, no es una zoonosis, no afecta a la calidad de la carne, y además, es "tratable" para el animal que la padece con lo que puede sobrevivir.
Se ha pedido a los representantes del sector que conciencien a los ganaderos para que ante la sospecha de tener algún animal con la enfermedad se pongan en contacto con un veterinario
Además, ha señalado que no es de declaración obligatoria ni causa vaciados sanitarios en las explotaciones afectadas. Por ello, se ha pedido a los representantes del sector que conciencien a los ganaderos para que ante la sospecha de tener algún animal con la enfermedad se pongan en contacto con un veterinario porque "cuanto antes se diagnostique y se ponga en tratamiento, hay más posibilidades de que el animal siga con vida".
También se ha informado de las recomendaciones clínicas y de carácter biosanitario y de las medidas higiénico-sanitarias a adoptar tanto en el transporte de los animales como en las propias explotaciones para evitar que se extiendan los contagios.
Palencia ha señalado que "no es una enfermedad para tener una alarma pública ni sanitaria", pero ante la que sí hay que actuar "con rapidez" para evitar que se extienda. Además, "es una enfermedad más de las varias emergentes, surgiendo en España desde el año pasado". En este caso, el vector es el mosquito.
REUNIÓN EXTRAORDINARIA DE CONSEJEROS
El consejero ha explicado que, los animales silvestres, son los que actúan como "reservorio" de la enfermedad, como los cierzos o los corzos, y ha incidido en que, trabajar en la población de la fauna silvestre es "un asunto de salud pública".
Así se lo ha hecho llegar a Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, al que esta misma mañana ha escrito para solicitarle una reunión extraordinaria de la junta permanente de Consejeros para poner en marcha un plan de prevención de bioseguridad en España.