La leptospirosis canina es una enfermedad infecciosa de origen bacteriano que representa un grave riesgo para la salud canina. Esta enfermedad puede afectar a múltiples órganos del animal y, según algunos estudios, puede alcanzar una tasa de mortalidad superior al 40%. Además, el riesgo de contagio asociado a esta enfermedad obliga a que cuando un perro infectado ingresa en un hospital veterinario, se deben tomar estrictas medidas de aislamiento y desinfección para proteger tanto a otros animales como al personal, al tratarse también de una zoonosis.
Como explica en declaraciones para AnimalCare, Daniel Acha, asesor veterinario en Boehringer Ingelheim, “la leptospirosis en los perros es una enfermedad grave que en un alto porcentaje de casos puede producir lesión renal aguda, disfunción hepática o pulmonar”. Además, esta enfermedad también puede “provocar alteraciones en la coagulación y afectar a otros órganos al ser una enfermedad multisistémica”.
"La leptospirosis es una enfermedad ampliamente distribuida en España"
Acha advierte de que “tradicionalmente ha sido una enfermedad asociada a climas tropicales, pero actualmente factores como el cambio climático, el aumento de las temperaturas, los episodios de lluvias intensas o la presencia de roedores hacen que hoy en día se considere una enfermedad de distribución mundial”. En el caso de España, añade,“es una enfermedad de declaración obligatoria en medicina humana” y “según los estudios de prevalencia, es una enfermedad ampliamente distribuida en España, siendo los serogrupos ‘Icterohaemorrhagiae’ y ‘Australis’ los más prevalentes”.
En cuanto al tratamiento, Acha recuerda que “la leptospirosis está producida por una bacteria espiroqueta por lo que el tratamiento está basado en terapia antimicrobiana como la doxiciclina y tratamiento sintomático dependiendo del cuadro clínico”. También destaca que en los casos más graves “se incorporan nuevas opciones de tratamiento como la diálisis”.
Desde la industria farmacéutica, explica que “se investiga el abordaje de la enfermedad desde múltiples aspectos”, tanto en prevención como en diagnóstico. “Se ofrecen nuevas vacunas que proporcionen una mayor protección frente a esta enfermedad” y se desarrollan técnicas diagnósticas como “los test rápidos de diagnóstico para uso clínico, la MAT o la PCR, y también recientemente se han desarrollado nuevas técnicas moleculares como la MST-PCR”.
LA VACUNACIÓN, “EL MÉTODO DE PREVENCIÓN MÁS EFICAZ”
En el abordaje de la enfermedad, la vacunación también juega un papel clave, especialmente para evitar el uso excesivo de antibióticos. Acha subraya que “los veterinarios hacen un uso racional de los antibióticos y sin duda, desde un punto de vista One Health, los veterinarios son una pieza clave como sanitarios en la prevención de zoonosis”. Y añade: “la vacunación actualmente es considerada el método de prevención más eficaz”.
En esta línea, recuerda que “en las nuevas guías internacionales de vacunación canina de la WSAVA 2024 ya se considera la vacunación frente a Leptospira como una vacuna esencial para administrar a todos los perros en países como España donde la enfermedad está presente”.
"Se han publicado estudios que analizan el papel que pueden tener los probióticos en esta enfermedad"
En cuanto al desarrollo de alternativas a los antibióticos, Acha señala que “la mejor alternativa al tratamiento, sin duda, es la prevención de estas enfermedades”. Explica que la industria trabaja en “la innovación y el desarrollo de nuevas vacunas” y también en “adaptar las presentaciones para mejorar la administración del tratamiento y evitar que haya producto sobrante”. Incluso, añade, “se han publicado estudios que analizan el papel que pueden tener los probióticos en esta enfermedad”.
Desde la compañía han hecho posible una nueva vacuna que “supone un paso importante para la protección de los perros frente a esta enfermedad, ya que proporciona una amplia protección frente a la infección, sintomatología, mortalidad, la excreción bacteriana, la colonización y las lesiones renales producida por la leptospirosis”, concluye el asesor veterinario, y confirma que “ya se encuentra disponible en España”.