Cada 21 de septiembre se celebra el Día Mundial del Alzhéimer, una enfermedad degenerativa que afecta a la salud mental de las personas. La demencia o el alzhéimer condicionan la vida de 800.000 personas en España. En el tratamiento de esta afección, el vínculo humano-animal puede ser un factor clave para el tratamiento y la recuperación de sus procesos médicos.
Expertos de Purina han confirmado la eficacia de las Intervenciones Asistidas con Animales (AAI) en el tratamiento de estas patologías. Estas intervenciones están relacionadas con Terapias Asistidas con Animales (AAT) o Actividades Asistidas con Animales (AAA) donde los pacientes se relacionan con perros formados a través de una metodología eficaz para conseguir los objetivos marcados por los sanitarios. En estas intervenciones también colaboran técnicos de apoyo.
Un estudio con AAT publicado en 2006 confirmó que algunos de los síntomas de comportamiento y psicológicos asociados con la demencia mejoraban considerablemente. En el 2019, la investigación se repitió y afirmó que el vínculo humano-animal servía de refuerzo positivo para tratar estas enfermedades.
Estas actividades "podrían crear compromiso y podrían ser un tipo de intervención beneficiosa para promover la salud de personas con demencia"
En esta investigación participó un grupo con AAA que reveló que estas actividades "podrían crear compromiso y podrían ser un tipo de intervención beneficiosa para promover la salud de personas con demencia", explica Purina en nota de prensa. Para llevar a cabo las terapias se valoró el grado de demencia de los pacientes.
Otro ensayó grabó las interacciones entre perros y pacientes con alzhéimer, y demostró que la empatía y el altruismo les había permitido sentir alegría. Este sentimiento derivó en un aumento se la autoestima en los pacientes.
Las AAI también han mostrado resultados prometedores frente a pacientes con deterioro cognitivo. En 2017, los grupos de AAI demostraron menos síntomas de comportamiento y psicológicos de demencia, especialmente depresión y agitación. Estas intervenciones tuvieron efectos muy positivos en pacientes con demencia y deterioro cognitivo.
Purina inició en 2015 varias investigaciones sobre el impacto del vínculo humano-animal. Tras los resultados positivos, la compañía continúa demostrando los efectos de las mascotas en las personas y pone de relieve la importancia de incluir a los animales como portadores del bienestar de las personas.