Tener plantas en casa es muy frecuente. Y que la curiosidad de nuestras mascotas les lleve a acercarse, olerlas e incluso morderlas no es tan extraño como se pueda imaginar, además de suponer un riesgo para su salud. En concreto, y si hablamos de los lirios, un riesgo potencialmente tóxico que puede provocar una lesión renal aguda en los gatos. De hecho, durante más de dos décadas, los efectos nefrotóxicos de las plantas de las especies Lilium y Hemerocallis en gatos han sido bien documentados, con síntomas iniciales como vómitos e hipersalivación que pueden aparecer horas después de la exposición.
En casos más graves, los signos de lesión renal aguda (LRA) suelen desarrollarse dentro de las primeras 24 horas, y sin tratamiento, las tasas de mortalidad pueden alcanzar entre un 50 % y un 100 %. A pesar de este grave riesgo, aún se desconoce la toxina específica que causa la lesión renal, lo que complica el desarrollo de protocolos de tratamiento basados en evidencia.
Estas recomendaciones se basan en un estudio observacional de sólo 25 gatos, donde la mayoría fue tratada con líquidos intravenosos y sobrevivió sin desarrollar lesión renal
El protocolo de tratamiento estándar incluye una descontaminación gastrointestinal en las primeras horas tras la exposición y la administración de líquidos por vía intravenosa durante 48 horas para reducir el riesgo de LRA. Sin embargo, estas recomendaciones se basan en un estudio observacional de sólo 25 gatos, donde la mayoría fue tratada con líquidos intravenosos y sobrevivió sin desarrollar lesión renal. La necesidad de un ensayo controlado aleatorizado para validar este tratamiento es evidente, aunque, dada la peligrosidad de la toxina en cuestión, la realización de dicho estudio podría no ser ética.
Dado que el tratamiento intravenoso no siempre es accesible para todos los propietarios de gatos, ya sea por razones financieras o falta de instalaciones veterinarias 24 horas, una alternativa sugerida ha sido el tratamiento ambulatorio con líquidos subcutáneos diarios y monitoreo de la función renal durante 48 horas. Sin embargo, hasta ahora, no se había estudiado la efectividad de esta estrategia de tratamiento en comparación con el protocolo hospitalario.
Un reciente estudio, publicado en la revista de la Asociación Médica Veterinaria Estadounidense (AVMA), comparó los resultados de 112 gatos expuestos a lirios, de los cuales algunos recibieron tratamiento hospitalario con líquidos intravenosos, mientras que otros fueron tratados de manera ambulatoria con líquidos subcutáneos. Los datos se recopilaron analizando la gravedad de la LRA, los procedimientos de descontaminación aplicados, y el estado final de los pacientes (si sobrevivieron o no).
Los resultados de esta investigación revelaron que la prevalencia de LRA fue similar entre ambos grupos de tratamiento: 46,9 % en pacientes hospitalizados y 43,8 % en pacientes ambulatorios. Este hallazgo desafía la creencia de que la hospitalización con líquidos intravenosos es siempre necesaria para prevenir el daño renal en gatos expuestos a lirios, y sugiere que el tratamiento ambulatorio puede ser una opción viable para algunos pacientes.
"Nuestros hallazgos sugieren que el tratamiento ambulatorio puede ser una opción viable para algunos gatos expuestos a los lirios"
"Nuestros hallazgos sugieren que el tratamiento ambulatorio puede ser una opción viable para algunos gatos expuestos a los lirios", afirma la Dra. Erica Reineke, profesora de urgencias y cuidados intensivos de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Pensilvania y una de las autoras del estudio. "Esto podría ser especialmente relevante para los propietarios de mascotas con limitaciones económicas, falta de acceso a instalaciones veterinarias abiertas las 24 horas u otros factores específicos de los gatos".
Además, los autores del estudio califican estos resultados como “excelentes” en ambos casos. Es decir, aunque los gatos hospitalizados tuvieron una tasa de supervivencia del 100% en comparación con una tasa de supervivencia del 87,5% para los gatos ambulatorios, esta diferencia, aunque estadísticamente significativa, sugiere que el tratamiento ambulatorio aún puede conducir a resultados favorables en muchos casos.
La Dra. Reineke concluye tras analizar los resultados de esta investigación que "es fundamental que los dueños de gatos comprendan que todas las partes de la planta de lirio son tóxicas para los gatos. La atención veterinaria inmediata es esencial, independientemente del enfoque de tratamiento".