La articulación temporomandibular, que desempeña un papel esencial en la masticación y salud oral de los perros al conectar la mandíbula con uno de los huesos del cráneo, ha sido objeto de estudio en el ámbito del diagnóstico veterinario.
Este método innovador, desarrollado por el equipo de investigación 'Diagnóstico por imagen y medicina Veterinaria' de la Universidad de Córdoba en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid, se basa en el ‘Renderizado de volumen tridimensional’, es decir, un conjunto de técnicas empleadas para mostrar en las dos dimensiones de una pantalla de ordenador un conjunto de datos que han sido muestreados en 3D.
Este método innovador utiliza más de 400 tomografías computarizadas (TAC) para estudiar distintas razas de perro. Los TAC, que emplean rayos X para obtener cortes transversales del interior del cuerpo, permiten muestrear datos en 3D. A partir de estas imágenes, el modelo ha logrado generar representaciones en tres dimensiones de la articulación temporomandibular, proporcionando una visión más detallada y precisa de esta estructura ósea.
Este análisis más profundo ayuda a comprender mejor la morfología específica de la articulación, un aspecto relevante considerando las variaciones en las cabezas de los perros debido a las 343 razas caninas
Uno de los investigadores principales del proyecto, Eduardo Hernández, ha destacado que este enfoque no solo mejora la comprensión de patologías como fracturas, luxaciones o artrosis, sino que también permite comparar de manera más detallada los planos ofrecidos por las TAC con las nuevas imágenes en 3D. Este análisis más profundo ayuda a comprender mejor la morfología específica de la articulación, un aspecto relevante considerando las variaciones en las cabezas de los perros debido a las 343 razas caninas reconocidas por la Federación Cinológica Internacional.
En definitiva, este trabajo representa un paso adelante en el diagnóstico veterinario al proporcionar un método complementario para el estudio de una articulación sujeta a patologías frecuentes, ofreciendo además una mayor comprensión de las características individuales de cada animal, lo cual puede ser crucial en la práctica clínica dada la diversidad morfológica entre razas caninas.