Durante 2022, las protectoras españolas recogieron 170.105 perros y 118.352 gatos, cifras que representa en total casi el 3% de animales de compañía que se estima que viven en España. La llegada de estos animales a las protectoras aumentaron ligeramente con respecto al año anterior, por debajo del número de animales que se recogían antes de la pandemia. En el caso de los perros, la cifra se sitúa un 1,5% por encima, mientras que el número de gatos recogidos es prácticamente idéntico, con un ascenso del 0,4%.
El Estudio ‘Él Nunca lo Haría’ 2022 de Fundación Affinity constata una vez más que el abandono y la pérdida constituyen los principales problemas para el bienestar y la calidad de vida de los perros y gatos en nuestro país. “Podemos hablar de una cierta estabilidad en las cifras de perros y gatos recogidos por las protectoras, pero sigue siendo un desafío relevante en el que las personas, entidades, profesionales y la administración pública pueden aportar soluciones”, asegura la directora de la Fundación Affinity, Isabel Buil.
CAMADAS NO DESEADAS, LAS MÁS VULNERABLES AL ABANDONO
Según el informe de Fundación Affinity, las camadas no deseadas siguen siendo un año más el primer motivo de abandono(19%). Le siguen los problemas de comportamiento del animal (12%), la pérdida del interés por el perro o gato (12%) y el fin de la temporada de caza (11%). Los problemas económicos han aumentado respecto al año anterior (pasando del 6% al 9%) igual que el cambio de vivienda que ya representa el 8% de los motivos de abandono.
El perfil de los animales que llegan a las protectoras varía según su especie. En el caso de los perros, más de la mitad son de edad adulta (57%), mientras que los cachorros representan un 28% y los perros de edad avanzada o sénior sólo un 15%. No obstante, de los gatos recogidos casi la mitad son cachorros, concretamente un 48%, seguidos de los adultos (43%) y finalmente los de edad avanzada, que representan el 9%. Sólo el 7% de gatos que ingresan en protectoras son de raza, mientras que el resto son mestizos.
LOS GATOS SUFREN EL MAYOR NÚMERO DE ABANDONOS
El estudio ofrece cifras preocupantes sobre la situación de los gatos. Según el informe, son los animales más vulnerables al abandono debido a varios factores. A diferencia de los perros, la proporción de gatos identificados que llegan a los centros de acogida es muy reducida, solo un 3% lleva microchip. Esto se debe, en primer lugar, a que llegan muchos cachorros fruto de camadas no deseadas sin identificar; y, en segundo lugar, los gatos se identifican menos porque al ser domésticos y no salir al exterior, se cree que no se van a extraviar, lo que imposibilita que puedan ser devueltos a sus familias al perderse. Otro de los factores alarmantes es que muchos de ellos están heridos (15%)o enfermos (38%)cuando son recogidos. Este hecho podría influir en que un 12% muera durante su estancia en el refugio, una cifra que triplica a la de perros fallecidos en la protectora.
La época de verano es la más complicada para las entidades de protección animal ya que el número de ingresos en los centros de acogida es superior debido al carácter estacional de su reproducción.
El informe muestra también diferencias entre perros y gatos en relación con el número de animales recogidos a lo largo del año. En el caso de los gatos, la época de verano es la más complicada para las entidades de protección animal ya que el número de ingresos en los centros de acogida es superior debido al carácter estacional de su reproducción. De hecho, 1 de cada 3 gatos recogidos por las entidades en todo el año llegan en esta época, lo que implica un reto de gestión de los gatitos para las protectoras. Por el contrario, la entrada de perros en los refugios es uniforme a lo largo del año.
LA IDENTIFICACIÓN, EL PASO MÁS IMPORTANTE
El bajo porcentaje de animales que llegan correctamente identificados, 26% en el caso de los perros y 3% en el de gatos, no mejora en los últimos 10 años. En este sentido, la identificación favorece la recuperación de animales perdidos, que tienen hasta 5 veces más posibilidades de ser devueltos a sus familias si llevan microchip y los datos de identificación son correctos.
“Tenemos medidas a nuestro alcance para reducir las cifras de abandono. La esterilización del animal es clave para prevenir las camadas no deseadas y la correcta identificación para que el perro o gato pueda ser devuelto a su familia en caso de pérdida. Además, la ayuda profesional de un veterinario etólogo o un educador canino puede ayudarnos y orientarnos para solventar los problemas de comportamiento que puedan surgir. Por último, realizar una reflexión previa en familia sobre las expectativas acerca de la convivencia con un animal puede contribuir a que haya menos casos de pérdida de interés hacia el perro o gato”, resalta Isabel Buil.