En los últimos meses, la Unión Europea ha abierto un debate sobre la investigación experimental con animales. El objetivo es implementar nuevas medidas legislativas que reduzcan la experimentación animal y plantear alternativas. En esta línea, la Comisión Europea plantea la modernización de la ciencia y pide medidas para establecer un cambio legislativo en el futuro.
El Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) recoge una serie de políticas destinadas a la protección de las prácticas con animales. Para el centro es fundamental proteger el bienestar de estos seres y, en su búsqueda de alternativas, han creado iniciativas que cumplan con la protección de los animales.
“El bienestar animal es por tanto uno de los pilares de nuestra investigación, que recurre a modelos animales solo cuando no hay alternativas experimentales para responder cuestiones científicas relevantes”, señalan desde el CNIO.
“Otra estrategia para usar menos animales es aprovechar los abundantes datos humanos que hemos ido recabando desde hace años, y que ahora están almacenados en bases de datos, en ordenadores”
Con motivo de la legislación europea, el centro investigador señala que, sus investigaciones “permiten minimizar su uso o reemplazarlos”. El uso de otras técnicas por parte del CNIO “hacen posible reducir en decenas de veces el número de animales necesarios”, subrayan.
“Otra estrategia para usar menos animales es aprovechar los abundantes datos humanos que hemos ido recabando desde hace años, y que ahora están almacenados en bases de datos, en ordenadores”, apuntan los investigadores.
Desde el CNIO se han comprometido con el bienestar animal y han adaptado sus acciones a las políticas establecidas para la investigación animal. “El bienestar de los animales de experimentación es un tema fundamental para el CNIO, así como lo es el estricto respeto y cumplimiento de los estándares de buenas prácticas y de la legislación vigente sobre protección de animales utilizados en experimentación y otros fines científicos, incluyendo la docencia”, añaden y señalan el Real Decreto 53/2013.
Además, defienden el bienestar animal “no solamente desde el punto de responsabilidad moral sobre los mismos, sino también porque no se podría lograr ciencia de excelencia sin bienestar animal”. El CNIO se compromete con la legislación y defiende el uso de métodos alternativos que promueve el Comité Ético de Experimentación Animal.
ALTERNATIVAS A LA EXPERIMENTACIÓN ANIMAL
En 2021, el CNIO firmó un convenio en colaboración con la Fundación Franz Weber con el objetivo de promover ayudas a jóvenes doctores para desarrollar proyectos de investigación con técnicas alternativas a la experimentación animal. Algunas propuestas fueron el uso de organoides humanos, la biología computacional o la tecnología de edición genómica CRISPR-Cas en células.
Esta colaboración, pionera en centros de investigación españoles, refleja el compromiso del CNIO con el bienestar animal y la sustitución de la experimentación animal cuando sea posible. Esta investigación se ha extendido hasta 2023 con el objetivo de que, los ocho científicos seleccionados, realicen su estancia postdoctoral en el Centro para desarrollar proyectos punteros de investigación del cáncer.
“Utilizaremos animales solo cuando no haya otras alternativas experimentales, y siendo conscientes de que el bienestar animal permea todos los procedimientos que se desarrollan en nuestro animalario”, concluyen.