Un nuevo estudio ha encontrado que no tener un horario regular para acostarse y despertarse y dormir cada noche de manera diferente puede suponer un mayor riesgo de obesidad, colesterol alto, hipertensión, niveles altos de azúcar en la sangre y otros trastornos metabólicos. De hecho, por cada hora de variabilidad entre el momento de acostarse y el tiempo de dormir, una persona puede tener hasta un 27% más de probabilidades de experimentar una anomalía metabólica. Los resultados del estudio, financiado por el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI), que forma parte de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos, han sido publicados en la revista 'Diabetes Care'. Para el estudio actual, los investigadores siguieron a 2.003 hombres y mujeres de 45 a 84 años, que participaron en el Estudio Multiétnico de Aterosclerosis (MESA) financiado por el NHLBI.