¿Cómo cuidar el cabello en invierno?

El frío y las bajas temperaturas hacen mella en nuestro organismo, en la piel y, aunque no lo creamos, también en nuestro cuero cabelludo y cabello.

Por eso, para que este invierno no nos pase factura, desde Marta García Esteticistas nos proponen una serie de consejos para mantenerlo sano:

1. La temperatura adecuada cuando te laves el pelo debe ser templada, para que no dañe el cuero cabelludo, que casi no se note sensación térmica. Masajea el cuero cabelludo en cada lavado al menos dos o tres minutos, ayuda a la oxigenación y buena calidad del cabello. También es importante aclarar abundantemente el cabello después de lavarlo para que no queden restos de champú o productos de cuidado capilar. Y mejor no lavarlo por la noche, sino por la mañana.

2. Es importante moldear el cabello sin utilizar calor excesivo ni en planchas ni secadores, y no lavarlo con champú agresivo, ya que daña el cabello y provoca que se vuelva más frágil y se rompa. Lo ideal es mantener el secador a una temperatura baja y usar protectores térmicos. Además, hay que intentar, cada vez que se use secador o plancha, en el siguiente lavado aplicar mascarilla reparadora, durante al menos 10 minutos.

3. Deja que el cuero cabelludo y cabello oxigenen y respiren, no hay que peinarlo tirante hacia atrás durante varias horas seguidas o días seguidos. Hay que intentar alternar dejar el pelo suelto un día y otro recogido.

4. Si se hacen deportes como ski, natación, montañismoo surf, hay que proteger el pelo como si fuese la piel, con protector solar adecuado y reponiéndolo cada dos horas.

5. Cuidar el cuero cabelludo significa cuidar el cabello y, en consecuencia, es cuidarse a uno mismo. Una dieta equilibrada, practicar ejercicio de manera regular y unas horas de sueño, son esenciales para tener un pelo bonito.

6. Algunos alimentos que benefician el cabello son las acelgas, lechuga, espinacas, berro o brócoli. Estos vegetales son excelentes por la vitamina A y C que estimulan la segregación de las sustancias sebosas responsables de mantener el cabello hidratado y acondicionado de forma natural. Las legumbres y vegetales que crecen en vaina aportan proteínas, hierro, zinc y biotina, importantísimos para fortalecer el cabello y evitar que comience a perder calibre y romper. Por otro lado, las zanahorias, cítricos, huevos y pescado azul, son maravillosos para el brillo, salud y fuerza capilar.


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