Un trasplante lleva consigo la responsabilidad de cumplir con una serie de medidas como la adherencia al tratamiento, hábitos de vida saludables y una alimentación adecuada
El Campamento Crece tiene como objetivo formar a los niños trasplantados en los hábitos de vida que tienen que adoptar tras un trasplante a partir de un programa de actividades con las que podrán realizar esta formación de manera divertida. Y es que, un trasplante lleva consigo la responsabilidad de cumplir con una serie de medidas como la adherencia al tratamiento, hábitos de vida saludables y una alimentación adecuada.
Además, durante el campamento tendrán lugar actividades lúdicas y de ocio como una excursión a Terra Mítica y la visita a Río Safari de Elche.
Durante toda su estancia los niños estarán asistidos por un total de siete enfermeros que se encargarán de sus cuidados necesarios, además de supervisar todos los aspectos sanitarios propios de la patología renal, como una adecuada ingesta de alimentos y el cumplimento diario de la toma de medicación.
En cuanto a las actividades lúdicas, de ellas se encargará un equipo formado por una coordinadora y cinco monitores, dos de ellos personas con enfermedad renal, en tratamiento de trasplante.
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